Boletín UNAM-DGCS-0948
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EL
FUNDAMENTALISMO DE EU, AMENAZA PARA LA HUMANIDAD: THEOTONIO DOS SANTOS
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Es necesaria la unidad latinoamericana, estimaron investigadores en el
“Seminario Internacional Siglo XXI: La Guerra y la Paz”, organizado por el
CEIICH
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Toda esta construcción ideológica, de estructuras económicas y poderío
militar, tiene como fundamento los intereses de las transnacionales: Flores
Olea
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Hay que luchar contra ese imperialismo y establecer la conciencia latinoamericana
de la necesidad de una integración entre nuestros países: Rolando García
El nuevo fundamentalismo de
Estados Unidos amenaza gravemente el futuro de la humanidad, si se toma en
consideración el poder económico y militar que manejan quienes lo encabezan.
Frente a esto, es necesaria la unidad latinoamericana, afirmaron investigadores
participantes en el “Seminario Internacional Siglo XXI: la Guerra y la Paz”.
Durante la ponencia “Guerra
general. Una perspectiva latinoamericana”, el politólogo, sociólogo e
investigador Theotonio Dos Santos señaló que en el plano militar y geopolítico,
la doctrina estadounidense del Destino Manifiesto alcanzó desarrollo total en
su búsqueda permanente de la justificación de su hegemonía necesaria e
ilustrada.
El fundamentalismo, abundó, es
una práctica que se considera con derecho a romper todos los esquemas. Por
ello, las consecuencias de eso para América Latina son graves, remarcó.
Dos Santos, quien ha sido
profesor de diversas universidades de Brasil, México y Chile, explicó que el
presidente de Estados Unidos, George W. Bush, produjo un conjunto de
declaraciones reunidas bajo el título de La estrategia nacional de los Estados
Unidos de América, expresión de un
nuevo fundamentalismo extremadamente peligroso.
En el Auditorio del Centro de
Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades (CEIICH) de la
UNAM, dijo que es más grave constatar que estas ideas alcanzan profundo
enraizamiento social que ha apoyado las propuestas del presidente estadounidense
después de los atentados del 11 de septiembre de 2001.
El documento de Bush señala,
entre otras cosas, que “la estrategia de seguridad nacional de Estados Unidos
se basa en un internacionalismo americano distinto que refleja la unión de
nuestros valores y nuestros intereses nacionales. El objetivo de esta
estrategia es ayudar a crear un mundo no solamente justo, sino también mejor.
Nuestras metas en el camino del progreso son claras: libertad política y
económica, relaciones pacíficas con los otros Estados y respeto a la dignidad
humana. Y este camino no es sólo latinoamericano, está abierto para todos”.
De esta manera, dijo Dos
Santos, se establece una relación perversa entre el mundo y Estados Unidos, ya
que esta nación es portadora de los ideales universales y sus empresarios son
la punta de lanza de ellos. Cualquier restricción a dichos ideales, o a los
intereses estadounidenses y a los representantes de la libre iniciativa son la
misma cosa, aseguró.
Apuntó que en el documento
están inscritos principios que se defienden en una Academia Militar como parte
de la definición de una estrategia en este sentido.
“Esto quiere decir que si algún gobierno se rehusa a implantarlos,
es pasible de acción militar”, indicó el especialista en el Auditorio de la Torre
II de Humanidades.
Dos Santos añadió que la
crisis del neoliberalismo se vive en toda la región latinoamericana, y en este
momento asistimos a un reforzamiento de la postura fundamentalista en el centro
del sistema mundial, con la posibilidad de justificar las acciones más duras,
dentro de un esquema de concepción
militar muy ideologizado.
“Es un cuadro que no indica
una situación de paz o tranquilidad. Parece que vamos al desarrollo de choques,
que aparecen en el centro bajo la forma de grandes manifestaciones”, explicó.
Y continuó: “es un cuadro
ideológico, militar, que nos lleva realmente a un periodo de gran inestabilidad
y a la necesidad de que nos preparemos ideológica y teóricamente para analizar
la evolución, las consecuencias y las posibilidades de acción” en esta
situación tan compleja y difícil que enfrentamos.
Por su parte, Víctor Flores
Olea, miembro del CEIICH, consideró claro que toda esta construcción
ideológica, de estructuras económicas y poderío militar, tiene como fundamento
último a los intereses de las grandes corporaciones trasnacionales.
Expresó que también los
intereses petroleros parecen estar en un primer plano. A su juicio, lo que
pretende el ala radical derecha en Estados Unidos es que Sadam Hussein abandone
el mando para apoderarse de esa nación, como lo han hecho en Afganistán.
Probablemente lo que se planea
es hacer una mascarada de democracia, con el propósito de controlar uno de los
territorios del mundo más ricos en petróleo, sentenció.
El también ex subsecretario de
Educación Pública y de Relaciones Exteriores se refirió al neoliberalismo
económico, es decir, el del mercado, controlado absolutamente por las grandes
corporaciones transnacionales, hasta el punto en que un gobierno como el de
Estados Unidos aparece de manera más nítida como simple Consejo de
Administración de esas empresas.
Flores Olea apuntó que hay una
movilización popular de rechazo a toda esta situación monstruosa, de engaño, de
belicismo desencadenado.
Recordó que el 70% del
electorado brasileño votó a favor de un hombre de gran popularidad y carisma,
Luiz Inacio Lula Da Silva, en el cual los ciudadanos confían, pero también
sufragaron por una alternativa al neoliberalismo.
En su oportunidad, Rolando
García, también integrante del CEIICH, opinó que una vez definido el panorama
internacional y habiendo identificado al monstruo, surge una pregunta: “¿qué
hacer?”.
Tenemos que luchar contra ese
imperalismo y establecer la conciencia latinoamericana de la necesidad de una
integración entre nuestros países, apuntó.
En la presentación del
Seminario del CEIICH estuvieron presentes John Saxe-Fernández y el director de
ese Centro, Daniel Cazés Menache.
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El politólogo e investigador Theotonio Dos Santos sostuvo que el presidente George W. Bush produjo un conjunto de declaraciones reunidas en el título “La estrategia nacional de los Estados Unidos de América”, expresión de un nuevo fundamentalismo en extremo peligroso. Participó en el Seminario Internacional Siglo XXI: la Guerra y la Paz, realizado en la UNAM.