Boletín UNAM-DGCS-0723
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OBESIDAD DE MENORES,
GRAVE PROBLEMA DE SALUD
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Entre el 13 y el 18% de los niños mexicanos
la padece, aseguró Liria Yamamoto, de la Facultad de Medicina
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Puede provocar enfermedades cardiovasculares
como diabetes mellitus, algunos tipos de cáncer, hipertensión arterial,
etcétera
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La proporción de menores obesos ha aumentado
debido a las prácticas sedentarias y el consumo de alimentos con grasas
saturadas, azúcares y harinas
La obesidad resulta un grave problema
de salud, ya que entre el 13 y 18% de los niños y adolescentes en México padece
ese mal que provoca enfermedades de alto riesgo, mientras que en los países
desarrollados el porcentaje es de entre el 10 y el 20%, afirmó Liria Yamamoto
Kimura, de la Facultad de Medicina.
Esta situación incrementa la
mortalidad por enfermedades cardiovasculares, diabetes mellitus, algunos tipos
de cáncer, hipertensión arterial, colesterol alto e inadaptación psicosocial,
entre otras, enfatizó.
En los últimos años, subrayó,
la obesidad en niños se ha incrementado en países en vías de desarrollo por las
prácticas sedentarias y los malos hábitos alimentarios.
Las familias de mayores recursos,
explicó, consumen mayor cantidad de alimentos ricos en grasas saturadas, azúcar
y harinas refinadas, y son quienes
presentan la prevalencia más alta de obesidad.
Es importante destacar que las
enfermedades crónico degenerativas, producto de la obesidad, se presentan a
partir de la tercera o cuarta década de vida.
Durante la infancia, dijo, la
obesidad puede no presentar ninguna sintomatología a menos que ésta sea muy
franca; sin embargo, el daño que desencadena está asociado con la mortalidad
más alta durante la edad adulta.
La especialista en salud
pública precisó que además de la obesidad existen otros factores asociados a
las enfermedades crónico degenerativas que se inician durante la adolescencia e
inclusive antes, tales como el consumo de alcohol, tabaco y otro tipo de
drogas; así como la inactividad física o sedentarismo.
A partir de estos elementos,
enfatizó, podríamos empezar a identificar a qué niños es preciso cuidar más por
estar propensos a morir en la edad adulta a causa de una de las enfermedades
asociadas a la obesidad.
En este sentido, recalcó, los
menores que fuman tabaco, no hacen ejercicio y consumen grandes cantidades de
alimentos ricos en grasas, sal y azúcares, estarán propensos a la obesidad.
Sin embargo, aclaró, los
factores de riesgo no son los mismos para cada estrato socioeconómico. Se
realizó un estudio entre 3 mil escolares de la delegación Coyoacán y el Oro,
Estado de México, tanto de escuelas públicas y privadas, y se encontró que los
niños rurales tienen un promedio de estatura 10 centímetros más bajo en
comparación con los del medio urbano.
Esto hace que cuando los
adolescentes rurales aumentan de peso tienen una densidad más alta por unidad
de estatura, es decir, tienden más a ser obesos.
En el medio rural la
alimentación de los niños es monótona y está basada en hidratos de carbono como
cereales y leguminosas; asimismo, su actividad física es muy intensa, pero su
talla está afectada porque no tuvieron las condiciones adecuadas en cuanto a
cantidad y aportes de proteínas y otro tipo de nutrientes, puntualizó.
En cambio, los niños de
escuelas particulares tienen un mayor poder adquisitivo y acceso a alimentos
más ricos en grasas y sal; por lo tanto, un niño criado del medio rural no
presenta el mismo perfil cardiovascular que uno de una zona urbana.
En las ciudades encontramos
mayor cantidad de colesterol total y lipoproteínas de baja densidad; en cambio,
en el campo hay más adolescentes con
hipertrigliceridemia y valores bajos de lipoproteínas de alta densidad o
colesterol bueno.
Asimismo, los niños de medio
urbano son más sedentarios y están más expuestos al consumo de tabaco y alcohol
en comparación con los niños de medio rural.
Para enfrentar el problema de
la obesidad infantil, los padres, maestros, nutriólogos y médicos, debemos
vigilar más de cerca la alimentación de los niños y su actividad física.
Es necesario, dijo, buscar que
realicen algún deporte, porque a partir del uso de los videojuegos la
proporción de niños sedentarios se ha incrementado considerablemente.
También es preciso supervisar
el consumo de alimentos fuera de la hora de la comida, ya que los refrescos,
frituras y dulces son ricos en contenidos de sal, harinas y azúcar.
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PIES DE FOTO
Foto 1
Entre 13 y 18% de los niños mexicanos tienen problemas de obesidad,
afirmó Liria Yamamoto, de la Facultad de Medicina de la UNAM.
Foto 2
La obesidad puede causar enfermedades cardiovasculares, diabetes
mellitus, algunos tipos de cáncer, hipertensión arterial, colesterol alto,
entre otras, señaló Liria Yamamoto, de la Facultad de Medicina de la UNAM.