Ciudad Universitaria

MANUEL RICO BERNAL

EDUARDO IBARRA COLADO

ANGEL DIAZ BARRIGA

GONZALO ZUBIETA RUSSI

MARIO ALVAREZ LEDESMA

RUPERTO PATIÑO MANFFER

JOSE LUIS MATEOS GOMEZ

Pies de fotos al final del boletín

PROPONEN CATEDRÁTICOS NUEVOS MODELOS DE EVALUACIÓN DEL TRABAJO ACADÉMICO

· José Luis Mateos, de la FQ, consideró que debe introducirse un nuevo sistema de evaluación permanente como el de “Certificación Profesional”

· Angel Díaz Barriga, director del CESU, reconoció que la UNAM no puede quedar al margen del proceso de globalización

Catedráticos de la UNAM y de la UAM se pronunciaron por la construcción de nuevos modelos de evaluación del trabajo académico, que propicien la equidad y favorezcan el desarrollo individual y de las instituciones, así como la actualización de los docentes y de los investigadores.

Durante la Mesa Redonda “Evaluación del Trabajo Académico”, realizada dentro del ciclo “El debate por la UNAM”, los participantes coincidieron en que debe revisarse el sistema actual de evaluación académica con el fin de lograr mejoras y definir si se desea una medición integral para todos o por tipo de actividad.

El profesor emérito de la Facultad de Química, José Luis Mateos Gómez, consideró que debe introducirse un nuevo sistema de evaluación permanente, como el de “Certificación Profesional”, en el que los académicos se sometan a juicio externo de otros colegas y en el que cada cierto tiempo, por ejemplo cinco años, se “recertifique” la capacidad para seguir ejerciendo como profesor de carrera.

Dijo que la certificación profesional merece estudiarse dentro de los cambios que se pretenden hacer en la Universidad Nacional, ya que asegurar la calidad del profesorado es uno de los requisitos indispensables para mejorar a la UNAM y mantener la aceptación de la sociedad.

En su oportunidad, Eduardo Ibarra Colado, profesor de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Unidad Iztapalapa, criticó las políticas de deshomologación salarial, las cuales más que evaluar el trabajo académico se limitan a certificar productos individualizados de trabajo, sin estar en condiciones de valorar su calidad o impacto.

Con ello, dijo, se pierde de vista la trayectoria académica sustentada en el desarrollo de líneas y proyectos de investigación que permiten consolidar cierto perfil académico y, al mismo tiempo, el ingrediente colectivo del trabajo docente. Por ello, propuso transitar hacia un nuevo modelo centrado en la valoración de las trayectorias que supone la carrera académica tipo.

El biólogo y maestro de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Zaragoza de la UNAM, Manuel Rico Bernal, señaló que todo sistema de evaluación es perfectible, pues ninguno funciona adecuadamente al aplicarse a una gama de casos. Por ello, planteó que cada dependencia universitaria cuente con un departamento específico de evaluación.

Rico Bernal aclaró que hay quienes ingenuamente creen que evaluación es sinónimo de premiación, pero así como se está dispuesto a recibir estímulos, también deberíamos estarlo para recibir sanciones e, incluso, descuentos. Ante ello, indicó, es necesario fomentar una cultura sobre el tema, que desafortunadamente no existe.

En el IIS revisaron los retos de la UNAM

En la mesa “Profesionalización académica en la UNAM”, celebrada en el Instituto de Investigaciones Sociales, se discutieron temas como los retos que enfrenta esta casa de estudios ante el proceso de globalización, la actualización de los docentes, así como la situación de la investigación y del estudiantado.

Angel Díaz Barriga, director del Centro de Estudios Sobre la Universidad (CESU), destacó que la UNAM no puede quedar al margen del proceso de globalización que vive el mundo. “Si en el presente siglo quiere colocarse a la vanguardia, necesariamente tiene que estudiar lo que sucede en el sistema de educación superior en el orbe, no para copiar, sino para innovar”.

En ese sentido, dijo que si nos planteamos el reto de ser una de las mejores universidades del mundo, debemos realizar estudios comparados de cómo son y funcionan éstas.

Por su parte, Mario Álvarez Ledesma, director general de Protección de los Derechos Humanos de la Procuraduría General de la República, pidió reflexionar acerca de las características de la Universidad, y realizar una fuerte inversión de recursos en las diversas áreas, sobre todo en investigación, para que quienes desarrollan esta labor se dediquen exclusivamente a ella y no la descuiden.

Al mismo tiempo, añadió, la institución debe contar en las aulas universitarias con los mejores cuadros de académicos para que formen a los futuros profesionistas que se necesitarán en todos los sectores de la sociedad.

El jefe de la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de Derecho (FD), Ruperto Patiño Manffer, se refirió a la situación de la planta docente de esa dependencia universitaria, cuyo principal problema, dijo, es que la mayoría de ellos tiene como primordial labor dedicarse a litigar como funcionarios públicos o a dar consulta jurídica y la docencia suele ser marginal.

Para acabar con ese problema, recalcó, la FD ha impulsado diversos programas de maestría y doctorado. No obstante, se requiere dar mayor seguridad a los académicos, y vincular a este sector con la investigación.

Por último, Gonzalo Zubieta Russi, investigador del Instituto de Materiales, reconoció la necesidad de que a los estudiantes, cuando comienzan a cursar una licenciatura, se les enseñe a pensar, así sea en una carrera de las ciencias duras o del área de las humanidades, como la filosofía.

En cualquier profesión, destacó, se debe comenzar con un curso de lógica deductiva, a través de ejemplos cotidianos, los cuales tienen que caracterizarse por su ingenio.

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PIE DE FOTO

FOTO 1

En la mesa "Profesionalización académica en la UNAM", Angel Díaz Barriga, director del CESU (al micrófono), dijo que si en el presente siglo la institución quiere colocarse a la vanguardia, debe estudiar lo que sucede en el sistema de educación superior en el mundo.

FOTO 2

El biólogo Manuel Rico Bernal señaló que es necesario fomentar una cultura de la evaluación en la UNAM, al participar en la mesa redonda “Evaluación del trabajo académico”, realizada en el Instituto de Geografía de la máxima casa de estudios