06:00 hrs. Julio 12 de 2002


Boletín UNAM-DGCS-0620

Ciudad Universitaria

 

Pies de fotos al final del boletín

LOS CIUDADANOS NO SABEN DÓNDE Y CÓMO ENCONTRAR LA INFORMACIÓN GUBERNAMENTAL

 

·        Filiberto Felipe Martínez Arellano, director del Centro Universitario de Investigaciones Bibliotecológicas de la UNAM, destacó que el problema es que nunca se difundió dónde estaba y cómo acceder a ella

·        Rechazó que el gobierno niegue el acceso a su información, “sólo es falta de conocimiento”

 

Los ciudadanos de México siempre han tenido acceso a la información gubernamental. El problema es que nunca se difundió dónde estaba y cómo acceder a ella, afirmó el director del Centro Universitario de Investigaciones Bibliotecológicas (CUIB) de la UNAM, Filiberto Felipe Martínez Arellano.

 

Precisó que es necesario enseñar a la gente que esta información existe, está disponible y puede ser de utilidad para que la nueva Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental cumpla el objetivo para el que fue creada.

 

Refutó que el gobierno niegue el acceso a su información. Sólo es “falta de conocimiento” sobre el papel de la biblioteca pública como centro difusor de todo tipo de información para los ciudadanos.

 

Explicó que la nueva ley tiene gran importancia porque permite que toda persona, independientemente de su condición económica y social, tendencia política, credo o religión, tenga acceso a la información que genera el gobierno.

Aunque este hecho se daba desde antes, en la actualidad muchas dependencias gubernamentales producen información de carácter estadístico e informes de sus actividades a través de medios electrónicos que se difunden por Internet.

 

Ejemplificó con el sitio: precisa.gob.mexico, el cual se anunció como la puerta de acceso a la información que el gobierno mexicano produce.

 

El también presidente de la AMB, especificó que la nueva ley prevé que en cada una de las dependencias gubernamentales existe una unidad de enlace que proporciona información. Asimismo, avisa que está disponible en medios como libros, trípticos, archivos públicos y electrónicos o a través de Internet.

 

Lo que la mayoría de la población desconoce, recalcó, es que esa información está en las bibliotecas, porque es en esos recintos donde se archiva toda la documentación gubernamental.

 

La biblioteca pública, aseveró, es el lugar democrático por excelencia donde cualquier ciudadano puede acudir y obtener todo tipo de información. Así, uno de los objetivos de la Asociación Mexicana de Bibliotecarios (AMB) es revalorar el papel de estas instancias y de los bibliotecólogos.

 

Ellos, puntualizó, tienen la misión de enseñar a los usuarios de las bibliotecas públicas a que ahí se encuentra la información gubernamental en cualquier medio: impresa y por medios electrónicos, entre otros.

 

Martínez Arellano dio a conocer que en este momento las bibliotecas públicas sufren una gran transformación debido a que están en proceso de computarización. Esta acción es parte del programa de mejoramiento de estos recintos que encabeza la AMB.

 

A través de este programa las bibliotecas públicas tendrán equipo de cómputo con el que podrán acceder a la información de carácter gubernamental.

 

Se trata, subrayó, de dos acciones complementarias: una, la información que ya está generada en algún medio tendría que estar disponible a través de la biblioteca pública. Mientras, la de carácter administrativo como memorándum, actas de reuniones, documentos particulares de archivo estaría a cargo de las unidades de enlace que funcionarían en cada una de las dependencias.

 

Advirtió que si se deja de lado el papel de las bibliotecas públicas y el gran potencial que tienen para ser un medio más de acceso a la información, el objetivo con el cual fue promulgada la ley no cumplirá su objetivo.

 

Toda información que se genere en cualquier medio y formato, libro o revista, debe ser destinada y dirigida a un público muy particular, pues el valor de la información radica en que ese usuario tenga acceso a ella.

 

El bibliotecólogo estableció que si se conjunta el esfuerzo entre las bibliotecas y las unidades de enlace que serán creadas en cada dependencia gubernamental, se contribuirá a que los ciudadanos tengan acceso a la información que el gobierno genera. Esto representa un gran avance en la vida democrática del país, pues es permitir a todos los ciudadanos conocer los actos de gobierno para tomar una actitud crítica ante ellos.

 

Dejó en claro que hay dos tipos de información gubernamental: la referente a los informes de cada dependencia, publicados de manera tradicional en forma impresa, y las estadísticas de los diversos sectores.

 

La información que considera la nueva ley como expedientes, reportes, oficios, acuerdos, circulares, instructivos, notas y memorándum, entre otras, y que es de tipo administrativo, estará a disposición del público.

 

Comentó que uno de los temas de investigación del CUIB es el acceso a la información y el papel de las bibliotecas públicas. De ahí que si el Instituto Federal de Acceso a la Información que se creará y normará este aspecto, “nos pidiera nuestra opinión, el Centro y la Universidad Nacional estarían dispuestos a dárselo”.

 

Dijo que el CUIB tiene los recursos humanos necesarios en estas áreas para dar opiniones de cómo operar de una mejor manera, a fin de que la ley cumpla con el objetivo para la cual fue creada.

 

En el Centro hay 28 académicos en las distintas áreas de investigación: bibliotecología y sociedad, organización de la información impresa y electrónica, usuarios de la información, educación bibliotecológica, historia de las bibliotecas, organización y manejo  de las bibliotecas, teoría bibliotecológica.

 

El sistema bibliotecario de la UNAM está coordinado por la Dirección General de Bibliotecas, cuya titular es Silvia González Marín. El acervo está constituido por entre seis millones y siete millones de volúmenes. Hay más de 100 bibliotecas en la UNAM, concluyó.

 

 

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PIES DE FOTO

 

FOTO 1

 

El director del Centro Universitario de Investigaciones Bibliotecológicas de la UNAM, Filiberto Felipe Martínez Arellano, aseveró que la información gubernamental siempre ha estado al alcance de cualquier ciudadano, lo que sucede es que no se ha difundido dónde se encuentra y cómo acceder a ella

 

 

FOTO 2

 

Filiberto Felipe Martínez Arellano, director del Centro Universitario de Investigaciones Bibliotecológicas de la UNAM y presidente de la Asociación Mexicana de Bibliotecarios, señaló que en este momento las bibliotecas públicas sufren una gran transformación debido a que se están computarizando