13:30 hrs. Junio 24 de 2002


Boletín UNAM-DGCS-0560

Ciudad Universitaria

 

 

Pies de fotos al final del boletín

 

NECESARIA UNA ADUANA ÁGIL, RÁPIDA Y CON MENOS CORRUPCIÓN

 

·       De otro modo no saldrá adelante ante las actuales exigencias del comercio internacional, dijo Eulalio Sánchez Gómez, asesor jurídico de la Oficialía Mayor de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público

·       Entre sus funciones se encuentran la seguridad nacional, pues debe cuidar el ingreso de armas, así como la sanidad animal y vegetal

·       Asistió a la Sala Multimedia Octaviano Campos Salas de la Facultad de Economía de la UNAM

 

La aduana mexicana tiene que ser cada vez más ágil, rápida y registrar menos corrupción, de otra forma no saldrá adelante ante las exigencias del comercio internacional, aseguró Eulalio Sánchez Gómez, asesor jurídico de la Oficialía Mayor de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

 

Tendría que continuarse con la unificación de criterios para evitar la discrecionalidad. Uno de los graves problemas enfrentado en las aduanas son las diferentes formas de aplicar la ley por parte de sus administradores, señaló.

 

Se debe disminuir el contacto entre el personal aduanal y los particulares, puntualizó, para evitar la presencia de estos últimos en las instalaciones de la organización, y hacer el proceso más rápido y sin desviaciones.

En la Sala Multimedia Octaviano Campos Salas de la Facultad de Economía, destacó que si bien es cierto que la recaudación es una de las tareas relevantes de las aduanas, ya no es la más importante.

 

Además de ser fuente de estadística y salvaguardia del comercio, aseguró Sánchez Gómez, en la aduana se ha cobrado conciencia de que también entre sus funciones se encuentran la seguridad nacional, pues debe cuidar el ingreso de armas, así como la sanidad animal y vegetal, ya que tiene que aplicar las normas respectivas para que no ingresen a nuestro país alimentos contaminados, por ejemplo.

 

Por otra parte, se requiere modernizar su infraestructura. Salvo las instalaciones de Nuevo Laredo, Colombia, Mexicali, Nogales y Piedras Negras, el resto necesita una importante inversión. En el caso de los puertos, Veracruz y Altamira han sido renovadas; Manzanillo tiene graves problemas al respecto.

 

Cada vez, señaló el funcionario, hay más tecnología que ayuda a seleccionar a quién se revisa y a quién no, de acuerdo con la información que se tiene; esto ya no debe realizarse de manera aleatoria, sino de forma inteligente: en estos momentos debería tener la capacidad de “cruzar” los datos de un producto, importador, proveedor, agente aduanal, destino o domicilio para obtener probabilidades más altas o menores de revisión.

 

Durante la conferencia La política aduanera mexicana y la posibilidad de la modernización de las aduanas, recalcó que aquella responde necesariamente a las directrices de la política económica y comercial nacional”; dependiendo de ello ha sido más permisiva o restrictiva a los productos de otros países.

 

Sin embargo, indicó, habría que hacer reformas legales muy profundas, pues debería haber “una autoridad nacional actuando en otro país y una de otro país actuando en territorio nacional”.

 

Apuntó, asimismo, que hay quienes dicen que gracias al Tratado de Libre Comercio con América del Norte el próximo paso es una unión aduanera, lo cual significaría desaparecer los sistemas respectivos  en México, Canadá y Estados Unidos y crear una entidad única como sucede en la Unión Europea.

Dicha tendencia, resaltó, exigirían un cambio profundo en cuanto a aranceles, los cuales deberían ser comunes, como también las preocupaciones de los países involucrados. Sin embargo, a la aduana mexicana actualmente le inquieta que no vengan productos de mala calidad (pollo, ropa usada, etc.); a Estados Unidos lo que le importa es que no entre droga. Como nuestras costumbres son distintas, “pensar en este momento en una unión aduanera es difícil”, señaló.

 

En 1982, recordó, dio inicio la apertura comercial, y siete años después, por ejemplo, la aduana de Nuevo Laredo se paralizó cuando llegaron a ella 700 camiones. Hoy en día esa cifra parece de risa, ya que se atienden hasta tres mil unidades. Y esto fue porque la política económica fue modificada.

 

Ahora, finalizó, se considera que el comercio internacional es la fuente de desarrollo de los países. “No sé si eso vaya a dar resultado, si esto cambie en unos días o años y modifiquemos el sistema, pero en este momento la tendencia es ésta”.

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Foto 1

 

El asesor jurídico de la Oficialía Mayor de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Eulalio Sánchez Gómez, aseguró que se debe modernizar la infraestructura de la s aduanas mexicanas para agilizar sus servicios

 

 

Foto 2

 

Eulalio Sánchez Gómez, asesor jurídico de la Oficialía Mayor de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, asistió a la Sala Multimedia Octaviano Campos Salas de la Facultad de Economía, en donde habló de la importancia de la aduana mexicana. Le acompaña César Rodríguez