Boletín UNAM-DGCS-0295
Ciudad Universitaria
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EN MÉXICO, MUEREN 45 MIL PERSONAS AL AÑO POR ENFERMEDADES ASOCIADAS AL
TABAQUISMO
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Guadalupe Ponciano, directora de la Clínica contra el
Tabaquismo de la UNAM, señaló que en el país 60 millones de personas están
expuestas a los efectos del humo del tabaco
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En la unidad, ubicada en la Facultad de Medicina, se
aplica un tratamiento de 10 semanas basado en terapias fisiológicas y
psicológicas para abandonar la adicción
En México mueren al año más de 45 mil
personas por enfermedades asociadas al tabaquismo, mientras en el mundo
fallecen cerca de cuatro millones por la misma causa, informó Guadalupe
Ponciano Rodríguez, directora de la Clínica contra el Tabaquismo de la Facultad
de Medicina de la UNAM.
En 1998, de acuerdo con la Encuesta Nacional de
Adicciones, había casi 13.5 millones de fumadores en el país. Hoy, añadió, la
cifra se incrementó a 15 millones de fumadores activos y, según datos aportados
por la Secretaría de Salud, en el país hay alrededor de 48 millones de
fumadores pasivos.
Esto quiere decir que más de 60 millones de
personas están expuestas al humo del cigarrillo. En el planeta, agregó, existen
aproximadamente mil 100 millones de fumadores, por lo que se considera este
asunto como un problema mundial.
Guadalupe Ponciano Rodríguez explicó
que la Organización Mundial de la Salud
(OMS) considera al tabaquismo como una de las principales causas de
mortalidad prevenible –124 diariamente por enfermedades asociadas-. “No es
amarillismo, se trata de un problema importante de salud pública”.
Según dicho organismo, el número de
muertes anuales causadas por enfermedades asociadas al tabaquismo, es similar a
las ocasionadas, en su conjunto, por el Virus de Inmunodeficiencia Humana, los
accidentes automovilísticos, la mortalidad materna, suicidios y homicidios.
“Indudablemente es uno de los principales problemas de salud pública a escala
mundial”.
En nuestro país, por ejemplo, la
adicción al tabaco es considerada el origen de más del 50 por ciento de las
muertes ocasionadas por enfermedades cardiovasculares.
Esta situación ha sido considerada
como adicción a una droga legal y no
como un mal hábito, que provoca una importante pérdida de la vida productiva.
El tabaquismo es una adicción que
corresponde a las características de una droga psicoactiva, es decir, la
nicotina, como estructura química, puede llegar a ocasionar un poder adictivo
tan importante como la cocaína o la heroína, reiteró.
Por considerarse una adicción, en el
campo de la investigación en esta materia se producen fármacos para el
tratamiento del tabaquismo, indicó Guadalupe Ponciano.
Centro universitario de ayuda
Fue en mayo de 2001 cuando la
Facultad de Medicina estableció la Clínica Contra el Tabaquismo, la cual está a
cargo de la doctora Guadalupe Ponciano, para brindar apoyo especializado a
quien desea dejar de fumar.
Un grupo multidisciplinario de
profesionistas, formado por médicos, psicólogos, químicos, biólogos y
comunicólogos, trabaja de manera conjunta para facilitar el abandono de la
adicción al tabaco.
En la clínica, explicó Ponciano
Rodríguez, se proporcionan terapias fisiológicas, donde se aplican tratamientos
de reemplazo de nicotina como chicles, inhaladores y parches, así como
tratamientos no nicotínicos; el más importante en este ámbito es el bupoprion,
tabletas que no contienen nicotina, las cuales se emplean en fumadores que han
utilizado los métodos anteriores.
Como parte del tratamiento, se
realizan terapias psicológicas cognitivo-conductuales, mediante las cuales se
aporta información a los pacientes para que ellos sean el elemento de cambio, y
definan cuáles son las barreras y los círculos viciosos de su comportamiento
que les impiden liberarse del tabaco.
Durante el tratamiento, con duración
de 10 semanas, se les enseña a canalizar adecuadamente su estrés, a tener
pensamientos racionales, y a contar con herramientas que les permitan vencer su
adicción a la nicotina.
Consideró que el fumador que acude
por ayuda a la clínica es aquella persona que por cualquier circunstancia se ha
dado cuenta que no puede librarse del tabaco, que necesita ayuda especializada
para ello. “Por lo general, manejamos grandes adictos que consumen entre una y
hasta cuatro cajetillas de cigarros al día”.
Antes de iniciar el tratamiento, se
hace una historia clínica de cada paciente para conocer su estado de salud;
para ello se les solicita electrocardiograma, radiografía de tórax, biometría
hemática, química sanguínea, y espirometría, que permiten prevenir los daños a
la salud asociados con esta adicción.
Luego de dos meses y medio de
tratamiento se hace un seguimiento de los pacientes durante 12 meses, para
evitar recaídas, las cuales son frecuentes en tabaquismo, por la facilidad para
conseguir los cigarros.
Destacó que la adicción al tabaco es
multifactorial. Por un lado encontramos que la edad de inicio es cada vez más
temprana y por otra parte muchas personas fuman por rebeldía, lo consideran una
válvula de escape a sus problemas.
Finalmente, Guadalupe Ponciano
señaló que en México se cuenta con la legislación apropiada para impulsar una
campaña antitabaco. “Sin embargo, falta que la ley se respete, concluyó.
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Guadalupe Ponciano Rodríguez, directora de la Clínica Contra
el Tabaquismo, de la UNAM, señaló que en México mueren al año más de 45 mil
personas por enfermedades asociadas al tabaquismo y en el mundo, por esta misma
causa, fallecen cerca de cuatro
millones