Boletín UNAM-DGCS-0265
Ciudad Universitaria
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EL NIVEL BÁSICO
DE EDUCACIÓN PRESENTA DEBILIDADES
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Francisco Jiménez Ruiz, académico de la Escuela Nacional de Trabajo
Social, advirtió que sus dos grandes debilidades son la endeble formación en
matemáticas y lingüística
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Programas mal diseñados y formulados e instrumentados de manera
inadecuada provocan que la inversión en la enseñanza se pierda, aseveró
El nivel básico del sistema educativo mexicano
tiene dos grandes debilidades: la endeble formación en matemáticas y en
lingüística, afirmó el académico de la Escuela Nacional de Trabajo Social
(ENTS), Francisco Javier Jiménez Ruiz.
Precisó que en el mundo la educación es un
rubro costoso, por lo que un dinero canalizado en programas mal diseñados y
formulados e instrumentados de manera inadecuada se pierde, situación que ha
ocurrido durante décadas en México con lo que convierte a la enseñanza en un
grave problema.
Al hablar sobre "Educación de excelencia
en un contexto de globalización", el doctor en ciencia política y
sociología por la Universidad Complutense de Madrid resaltó que ello provoca el
desinterés de niños y jóvenes por el estudio.
No sólo se trata de falta de recursos
económicos, subrayó, sino que a infantes y jóvenes no les gusta el estudio. De
continuar este hecho, se generará un "efecto devastador a largo plazo y
las posibilidades de elevar el nivel de escolaridad en el país se pondrán cada
vez más difíciles".
Aunado a esto, advirtió, frente al abandono y
ante la escasez de recursos económicos para ampliar el número de matrícula, la
situación se vuelve "catastrófica", y se crea "un panorama muy
desolador".
Sin embargo, dejó en claro que aun cuando falta
mayor inversión económica en materia educativa, es indispensable reestructurar
y modificar los contenidos de este sistema para que quien ingrese a la
educación básica tenga los suficientes estímulos que le permitan concluir sus
estudios y le sea atractivo continuar hasta la obtención de un título
universitario.
El especialista en teoría de juegos y
aplicaciones por la Universidad Essex, Inglaterra, puntualizó que en la actualidad pareciera que en México es más
importante el resultado terminal, las estadísticas, y no la esencia. Así, mientras sea mayor el número de personas
con certificado de primaria y secundaria se cree que con ello se avanza en el
nivel educativo.
De esta manera, abundó, alumnos con debilidades
estructurales en su formación y bajas calificaciones tienen como único interés
obtener los certificados. El problema es que al llegar al bachillerato a esta
población se le dificulta el aprendizaje por su poca preparación, a lo que se
suma la falta de rigor, el bajo nivel de formación de los profesores, quienes,
en muchos casos, sólo imparte clases para aumentar su currículum porque en las
universidades públicas ni siquiera laboralmente son compensados.
En cambio, comentó, en el sistema anglosajón
europeo la situación es diferente. Las matemáticas se imparten en toda la vida
académica del estudiante, sin importar la carrera y especialización que se
trate.
Consideró que para combatir esta situación es
necesario que los diferentes actores sociales y grupos de poder adopten un
papel de responsabilidad frente a la educación, porque no sólo le corresponde
al gobierno sino a los profesores, padres y sociedad en general.
"Sociedad y gobierno deben hacerse
copartícipes y corresponsables en el problema de la educación".
En materia de globalización, Jiménez Ruiz
destacó que un papel fundamental lo ocupan las empresas maquiladoras, en las
cuales se carece de un desarrollo tecnológico. "Esto es lo más grave"
porque no hay inversión para este rubro ni promoción en investigación para el
avance de la ciencia. Ello, propicia que México sólo pueda aportar la mano de
obra.
Aun cuando el país ha hecho importantes
esfuerzos porque estas empresas inviertan en tecnología e investigación
científica, planteó, los resultados todavía son modestos en comparación con la
problemática nacional.
Sostuvo que la educación también es un problema
de cultura y actitudes. Es fundamental que se vea a la enseñanza como un
elemento benévolo, generador de resultados económicos. Es decir, que la persona
que estudie sepa que al obtener un título con calidad mínima podrá asegurarse
un ingreso digno de por vida.
No como en la actualidad, indicó, que un título
no le garantiza nada al profesionista en términos de ingresos en su vida e,
incluso, hay gente que se muestra satisfecha porque sin estudios ha generado un
gran patrimonio familiar.
El investigador propuso una reforma estructural
en el sistema educativo nacional y en sus contenidos, pues con las
modificaciones de los planes de estudio en la educación básica de los años 70
bajó el nivel y se suavizaron los criterios de rigor académico: se sustituyó la
descripción frente a lo analítico, con las consiguientes consecuencias de largo
plazo. Parte, es la debilidad en matemáticas y lingüística.
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FOTO 1
Francisco Javier Jiménez Ruiz, académico de la Escuela
Nacional de Trabajo Social de la UNAM, sostuvo que es altamente deficiente el
sistema educativo mexicano en el nivel básico
FOTO 2
El académico de la Escuela Nacional de Trabajo Social
de la UNAM, Francisco Javier Jiménez Ruiz, advirtió que las dos grandes
debilidades del sistema educativo nacional son la endeble formación en
matemáticas y lingüística