06:00 hrs. Febrero 26 de 2002


Boletín UNAM-DGCS-0174

Ciudad Universitaria

 

Pies de foto al final del boletín

MAYOR DEPENDENCIA AGROALIMENTARIA DE MÉXICO A PARTIR DE LA FIRMA DEL TLC

 

 

·        México no protege al campo: Emilio Romero Polanco, del IIEc

·        En jaque, dos terceras partes de la agricultura mexicana con el tratado, agregó

 

A partir de la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC), la dependencia agroalimentaria de nuestro país se incrementó, ya que a diferencia de Canadá, México no protege a sus sectores más débiles del campo, como a los productores de granos básicos y forrajes, aseguró Emilio Romero Polanco, del Instituto de Investigaciones Económicas (IIEc) de la UNAM.

 

Al participar en el VIII Congreso de la Asociación Mexicana de Estudios sobre Canadá (AMEC), "Fronteras reales/fronteras simbólicas", realizado en el Palacio de la Antigua Escuela de Medicina, el investigador destacó que los productores mexicanos de granos cobran importancia estratégica, ya que representan el 68% de la superficie cultivada, y ocupan el 75% del total de productores agrícolas en nuestro país.

 

"Es decir, el TLC está poniendo en jaque a cerca de dos terceras partes de la agricultura mexicana, y de los productores que desarrollan esta actividad", añadió Romero Polanco.

 

En su intervención, destacó que lo mismo sucede en el sector ganadero. Es decir, si bien por un lado se ha logrado incrementar el flujo de exportaciones, sobre todo en el noreste del país, en materia de becerros para satisfacer la demanda del sur de Estados Unidos, continúa en aumento la dependencia mexicana en la importación de carne y leche.

 

A su vez, Gabriela Correa López, de la Universidad Autónoma Metropolitana, plantel Iztapalapa, comentó que después del 11 de septiembre, la seguridad nacional en América del Norte se incrementó "hasta el tope".

 

En el caso de México, subrayó, "no está claro, estamos mucho más preocupados por la recesión económica - que ya reconocíamos antes de septiembre -, que por las medidas de seguridad".

 

Apuntó que todavía se discutirá por mucho tiempo si México y Canadá son socios, rivales o simplemente están asociados por la geografía. "Hay mucho por hablar en la posición de coincidencias o divergencias".

 

Por su parte, Jorge Retana, académico de la Escuela Nacional de Estudios Profesionales (ENEP) Aragón, señaló que la recesión económica en América del Norte, cuya fuente de propagación es la propia economía estadounidense, sacudió el discurso de la nueva economía exenta de ciclos, y obligó a una mayor mesura y rigor en el análisis.

 

En la mesa Integración Regional, el especialista señaló que por la gran influencia de Estados Unidos en la región de libre comercio de América del Norte, el fenómeno recesivo afectó a las economías, tanto de Canadá y México con cierta severidad, aunque en forma desigual. "Evidentemente, la mexicana sacó la peor parte y la canadiense se ha defendido de manera aceptable".

 

Subrayó que la poderosa influencia de Estados Unidos, como motor de la economía mundial, hizo sentir ese tipo de efectos en las diferentes regiones del mundo, al grado de que el Fondo Monetario Internacional, que en su reporte Prevenciones económicas mundiales (último trimestre de 2001), luego de los acontecimientos del 11 de septiembre, externó su preocupación por la situación económica planetaria, ajustando sus previsiones de manera más pesimista para el final del 2002.

 

Por último, Mauricio Soto, investigador del Centro de Investigaciones sobre América del Norte, comentó que la industria automotriz tiene una enorme importancia en las economías de los países firmantes del TLC. En cada una se crea un importante número de empleos directos e indirectos, a través de vínculos con proveedores y productores de insumos de este sector: uno de cada diez empleos en Canadá y Estados Unidos, por ejemplo, está relacionado con este sector.

 

De igual manera, señaló que México se ha convertido en el tercer proveedor de bienes más importante hacia Canadá, así como su mayor socio comercial en el continente, después de Estados Unidos.

 

En la actualidad, México y Canadá son productores netos, es decir, fabrican más de lo que consumen y su producción se orienta principalmente hacia Estados Unidos, con quien tienen mayor intercambio. Por tal razón, el comercio entre ambos países ha sido escaso.

 

 

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Pie de foto 1

México no protege a sus sectores alimentarios, afirmó Emilio Romero Polanco, del IIEc

 

Pie de foto 2

Después de los atentados del 11 de septiembre la seguridad en América del Norte se incrementó hasta el tope, dijo Gabriela Correa López, de la UAM Iztapalapa.

 

Pie de foto 3

El fenómeno recesivo afectó las economías, pero a México le tocó la peor parte, indicó Jorge Retana, de la ENEP Aragón