Boletín UNAM-DGCS-00101
Ciudad Universitaria
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TRANSPARENCIA Y
DEMOCRACIA INTERNA EN EL PRI, PAN Y PRD PARA CREAR CONFIANZA EN LA CIUDADANÍA
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De otra manera habrá falta de credibilidad
en la política y apatía en las elecciones: Moisés Pérez Vega, académico de la
Escuela Nacional de Trabajo Social
·
Los institutos políticos deben demostrar
capacidad de cohesión y unidad, agregó
Los tres principales partidos
del país, PRI, PAN y PRD, tienen la obligación de realizar procesos electorales
internos transparentes y democráticos que propicien la confianza de la
ciudadanía. De lo contrario, la falta de credibilidad en la política se
agudizaría, la apatía será generalizada y se reflejará en los comicios
entrantes, advirtió el académico de la Escuela Nacional de Trabajo Social
(ENTS) de la UNAM, Moisés Pérez Vega.
Precisó que cualquier duda en
la población significará un retroceso, porque partidos y políticos demostrarán
que si no pueden aplicar prácticas democráticas internas, menos lo harán en el
ámbito nacional.
En entrevista, el politólogo
explicó que en el cambio hacia la democracia de los últimos años son cada vez
más importantes los procesos electorales de los partidos, pues según lo que
ocurra en su interior se podrá entender la política en esferas más
generalizadas.
Los institutos políticos,
sostuvo, tendrán que demostrar su capacidad para mantenerse cohesionados y
unidos a través de procesos electorales democráticos que incentiven la
participación ciudadana y la confianza en ellos.
Destacó que se trata de llevar
a cabo campañas propositivas, equitativas y poco onerosas, de frente al
ciudadano; no criticadas, corporativas y mediante prácticas fraudulentas,
porque las consecuencias negativas podrían manifestarse en las elecciones
próximas y las del 2003.
Sobre el Revolucionario
Institucional, Pérez Vega señaló que es fundamental mantener la unidad y
renovar la dirigencia, porque con ninguno de los dos candidatos a la
presidencia: Roberto Madrazo y Beatriz Paredes, se ven posibilidades de cambio
ni adecuación a los tiempos actuales y, menos aún, de llevar al PRI a la
democratización en el corto plazo, porque no han presentado ninguna propuesta
al respecto.
Además, resaltó, el instituto
político está desconcertado ante la nueva etapa democratizadora, dado que ya no
es el eje aglutinador de todas las fuerzas. Esto crea cierto desequilibrio a su
interior que podría generar conflictos si las elecciones de febrero próximo no
son transparentes.
El tricolor, apuntó, es un
partido convulsionado por falta del eje rector que en el pasado era el jefe del
Ejecutivo Federal. En estas circunstancias, agregó, como oposición deberá
demostrar que puede organizar una elección interna, pero consideró que
resultará muy difícil acabar con las inercias.
El especialista en partidos
políticos comentó que el supuesto transformador, Roberto Madrazo, habla de
volver y escuchar a las bases pero no muestra señales de que en realidad lo
hará. Se trata, dijo, de un político pragmático dispuesto a cualquier cosa para
llegar al poder, aunque “no creo que vaya a realizar la reforma política del
PRI”.
Advirtió que si Madrazo pierde
podría escindirse del tricolor, y si
Beatriz Paredes obtuviera el triunfo deberá llamar a todos los grupos y
sectores para realizar la reforma interna.
En cuanto al Partido de la
Revolución Democrática, planteó que a pesar de que uno de sus objetivos
principales es la unidad y evitar las impugnaciones internas como ocurrió en
1999 –cuando incluso fueron anulados los comicios–, hay fuertes problemas de competencia
mediante ataques y recriminaciones.
El aspirante a la presidencia del PRD,
Jesús Ortega, apuesta a la democratización del partido para que sea un
instituto de izquierda propositivo y moderno.
En tanto, la candidata Rosario
Robles pretende dar una imagen independiente, libre de presiones y sin el peso
de Cuauhtémoc Cárdenas.
Al hablar sobre el PAN, Moisés
Pérez Vega expuso que se trata de un tipo de elección diferente, con campañas
internas menos intensas, pues se efectúan a través de delegaciones y consejeros
nacionales. Son mecanismos más limitados y no participan las bases.
Históricamente, añadió, Acción
Nacional ha funcionado de esta manera. En este partido, Luis Felipe Bravo Mena
busca la reelección apoyado por el senador Diego Fernández de Cevallos,
mientras que Carlos Medina Plascencia es respaldado por Vicente Fox.
El objetivo del ganador y
nuevo dirigente del albiazul, acotó, deberá replantear la reforma del PAN con
el gobierno, dado que Fox los ha rebasado. Esta problemática es evidente en la
conformación del gabinete y la presentación de iniciativas al Congreso de la
Unión, las cuales no fueron discutidas con el partido.
En esta contienda, debe
buscarse al candidato que asegure la mayor vinculación entre el gobierno y
Vicente Fox con el PAN, concluyó.
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Moisés Pérez Vega, académico de la
Escuela Nacional de Trabajo Social de la UNAM, dijo que la transparencia y la
democracia interna en el PRI, PAN y PRD son esenciales para crear confianza en
la ciudadanía