Boletín UNAM-DGCS-987
CON FOX, IMPORTANTES
CAMBIOS EN MATERIA DE INICIATIVAS INMIGRATORIAS
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Mónica
Verea, investigadora de la UNAM, comentó que el presidente ha hecho
planteamientos novedosos en esa materia
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Indicó
que por muchos años se consideró la inmigración clandestina de los mexicanos
como “un mal necesario”
Con
Vicente Fox se ha dado un cambio importante en materia de iniciativas inmigratorias,
aseveró Mónica Verea, del Centro de Investigaciones sobre América del Norte,
quien recordó que por muchos años los gobiernos anteriores mantuvieron una
“no actitud” ante la inmigración y siempre consideraron, silenciosa y conscientemente,
que ese fenómeno constituía un mal necesario.
Por muchos años se
consideró que los mexicanos que cruzaban la frontera en forma legal e ilegal,
lo hacían como una válvula de escape que aliviaba tensiones económicas,
políticas y sociales, sobre todo en épocas de crisis económicas. Por ello, el
gobierno de México debe continuar con la formulación de su política migratoria
tan necesaria e inexistente por tantos años.
En
la actualidad, dijo, el presidente norteamericano George Bush reconoció
públicamente que esta inmigración beneficia no sólo a la economía de aquel país
sino también a la del nuestro, por las cuantiosas remesas que envían a sus
familiares las cuales fluctúan entre 6 mil y 8 mil millones de dólares anuales.
En
materia de inmigración el presidente Fox ha hecho planteamientos novedosos. Al
principio de su gestión, el presidente señaló que para terminar con la
inmigración ilegal era necesario abrir paulatinamente las fronteras para crear
una región al estilo europeo para que los trabajadores fluyeran ágilmente, lo
cual fue sometido a varias críticas y poco a poco el primer mandatario ha silenciado
ese tono europeizante.
Señaló
que es de reconocer que a principios de la década de los años 90 dio inicio una
nueva política exterior mucho más activa, la cual brindaba una apertura y la
intensión de establecer mayores nexos con los países socios que tomó la
vecindad la vecindad de las fronteras como un factor positivo.
También
en aquella ocasión se consideró por primera ocasión a la comunidad mexicana
norteamericana que habita en EU, como potencialmente importante para México,
por lo que se deberían establecer nexos con ellos y para ello se estableció una
dirección general de comunidades en el extranjero.
Reconoció que con
la administración de Vicente Fox se ha intentado elaborar una política para los
inmigrantes, la cual nunca ha existido. “Siempre se ha dado respuesta a la
amenaza de deportaciones masivas pero nunca se ha considerado qué hacer, cómo
negociar, cómo argumentar o cómo responder, siempre ha sido una voz pasiva, una
voz defensiva y nunca ofensiva”.
Mónica Verea
subrayó que es necesario visualizar que con el actual gobierno, el aspecto
migratorio cobró importancia. Por ejemplo, señaló, se creó el Departamento de
Atención a Inmigrantes, la Dirección de Asuntos Fronterizos, además de que el
presidente se ha empeñado en la posibilidad de establecer un programa de
trabajadores huéspedes y una amnistía.
En los 10 meses de
administración, Vicente Fox se ha reunido con el presidente Bush en varias
ocasiones, lo que significa un mayor acercamiento con el gobierno
estadounidense y una actitud mucho más responsable en torno a este problema.
Consideró
indispensable insistir en una colaboración mediante el establecimiento de un
programa de regularización para permitir que los indocumentados salgan de la
clandestinidad, así como el establecimiento de un programa de visas dirigido
específicamente a nuestro país con el fin de lograr un acceso ordenado, legal y
temporal a la unión americana, tratando de establecer estándares laborares
justos con salarios apropiados.
Sin embargo, dijo, a raíz de los
acontecimientos terroristas ocurridos en Estados Unidos es inminente que
México, como nación, redefina sus fronteras. Los hechos del 11 de septiembre
marcan un parteaguas en las relaciones internacionales en general y en las
bilaterales en particular. Desafortunadamente –añadió– la tendencia hacia una
frontera abierta entre México y Estados Unidos, se revertirá.
En el Palacio de
Minería, Mónica Verea puntualizó que el debate estadounidense en torno al tema
de la inmigración será vinculado con el terrorismo. “Las discusiones entre
México y EU en esta materia, darán un viraje en tendencia y actitud, pues no
sólo se va a lanzar una lucha frontal en contra de los múltiples ingresos de
extranjeros ilegales sino de los que cruzan la frontera con documentos en forma
temporal y prolongan su estancia legalmente”, añadió.
El sinónimo ilegal
igual a terrorista es probable que surja y se perciba en cada indocumentado a
un enemigo potencial y no a un trabajador que apoya a la economía con su fuerza
de trabajo, opinó.
“Resulta poco
probable que en EU se apruebe un programa de regularización o normalización de
la condición migratoria de algunos indocumentados y, mucho menos, la utópica
propuesta de abrir paulatinamente las fronteras y convertirnos en una comunidad
real al estilo europeo” señaló Mónica Verea.
Si el gobierno
mexicano pretende estar comprometido como socio y recibir una relación
especial, se verá presionado a colaborar y destinar más recursos económicos
para salvaguardar ambas fronteras. “Quizá en este punto radicará nuestra
cooperación antiterrorista a cambio de la eventual aprobación de un programa de
trabajadores huéspedes
Es urgente insistir
en la necesidad de la creación de un sistema migratorio bien manejado y seguro
en el que se garanticen los derechos humanos y laborales de los trabajadores de
manera tal que se genere una frontera compartida y no divisoria como hoy se
vislumbra, concluyó Mónica Verea.
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