NO HAY RIESGO DE DEVALUACIÓN EN MÉXICO A CONSECUENCIA DE LOS ATENTADOS, EN EL CORTO PLAZO

· Las académicas de la UNAM Alicia Girón y Eugenia Correa destacaron la necesidad de reactivar la generación de empleos como forma de incentivar el consumo

· El gobierno debe dejar atrás su política monetaria contraccionista, aseguró Alicia Girón, directora del IIEc

· Es más rentable para reactivar la economía lanzar dinero en lugar de bombas en el largo plazo, subrayó Eugenia Correa, investigadora de la FE

México no sufrirá en el corto plazo una devaluación del peso a consecuencia de las repercusiones financieras de los atentados terroristas en Estados Unidos afirmaron las académicas universitarias Alicia Girón González y Eugenia Correa, quienes agregaron que la manera de superar el efecto recesivo que estos episodios tendrán en la economía mundial es a través de la intervención del Estado para la generación de empleo.

En conferencia Alicia Girón, directora del Instituto de Investigaciones Económicas (IIEc) de la UNAM, explicó que ante la posibilidad de que se implantara mundialmente una economía de guerra, es probable que muchas naciones adopten modelos económicos keynesianos y se enfoquen a la generación de empleo y el incremento del consumo.

Una economía de guerra, indicó, supone la reorientación del gasto y en este sentido sería positivo que el gobierno mexicano tuviera la creatividad para orientar sus acciones a generar trabajo y crecimiento.

Por lo anterior, subrayó, debe insistirse en la necesidad de que el Poder Ejecutivo Federal convoque a un gran acuerdo nacional para modificar la política monetaria contraccionista y reactivar la economía nacional, con el propósito de evadir el círculo vicioso que genera pobreza creciente en nuestro país.

Girón González señaló que la estructura productiva mexicana se ha visto severamente afectada en las últimas tres décadas, por lo que no es de esperarse que el incremento en la inversión extranjera o un eventual aumento en los precios del petróleo derivados de los acontecimientos ocurridos el 11 de este mes en Estados Unidos no bastarán para alterar esa situación.

En este sentido, la posibilidad de que la Reserva Federal norteamericana haga descender nuevamente las tasas de interés, como lo ha hecho ya en siete ocasiones en lo que va del año, tampoco servirá para reactivar la economía si no se pone énfasis en la generación de empleo.

La directora del IIEc destacó que el pánico y la incertidumbre producto de los atentados en Nueva York son las peores consecuencias que pueden haber sufrido los mercados financieros internacionales, ya que la búsqueda desesperada de dinero en efectivo por parte de la población puede llevar a la quiebra a los bancos.

Por su parte, la investigadora de la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de Economía (FE), Eugenia Correa, consideró que los ataques terroristas en Estados Unidos hacen suponer que en el futuro los pronósticos económicos estarán determinados por el curso de los acontecimientos políticos y militares en el plano internacional.

La catedrática de la FE consideró que a largo plazo podría resultar más rentable para algunas naciones, en el marco de una economía de guerra como la que se avizora, “lanzar dinero en lugar de bombas”. El incremento del consumo es una forma de reactivar la actividad económica en un contexto de recesión, tal es la disyuntiva en la que se encuentra el mundo en la actualidad, puntualizó.

En el caso de México, continuó, el ciclo recesivo avanzará, por lo que no es de esperarse que se alcance crecimiento económico alguno, cuando menos hasta mediados del próximo año. A ello debe sumarse, especificó, que la recesión norteamericana provoca el retorno de muchos trabajadores migrantes a México, lo que significa la pérdida de las remesas de dinero que recibían sus familiares en nuestro país.

Por otra parte, precisó, diversas regiones del país sufren la disminución del volumen de exportaciones agrícolas. En este panorama, ante una eventual escalada de violencia es predecible que la economía norteamericana experimente mayor cerrazón, con lo cual se limitaría el movimiento de capitales y el comercio.

La investigadora universitaria anticipó que tampoco hay que temer una devaluación del peso frente al dólar como consecuencia de los recientes acontecimientos. La situación del dólar no se modificará una vez que se reabran los mercados financieros que han permanecido cerrados a partir de los atentados en Nueva York.

Eugenia Correa dijo que la presencia de la industria maquiladora en la actividad económica nacional experimentaba una tendencia decreciente y no es de esperarse que la misma, así como la inversión extranjera directa en otras ramas industriales, puedan reactivarse en el corto plazo.

Por otra parte, existe la expectativa de que los precios del petróleo se incrementen, aunque no de forma exagerada. Esta tendencia se mantendrá, concluyó, hasta tanto no se resuelva la incertidumbre en torno al futuro del Medio Oriente y la posibilidad de un conflicto armado en la región, generado por las represalias que los estadounidenses puedan ejercer en respuesta a los ataques terroristas.

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PIES DE FOTO

La investigadora de la UNAM, Eugenia Correa, descartó la posibilidad de una devaluación a consecuencia de los atentados terroristas en Estados Unidos.

Alicia Girón, directora del IIEc, subrayó la necesidad de que el Ejecutivo Federal convoque a un acuerdo nacional para superar las dificultades económicas que se avizoran, producto de los ataques terroristas a la unión americana.