Boletín UNAM-DGCS-842
PIE
DE FOTO AL FINAL DEL BOLETIN
EL ESTUDIO DE LAS REDES SOCIALES PERMITE CONOCER LAS
ENTRAÑAS DE LA VIDA NACIONAL
·
Jorge Gil Mendieta, secretario académico de
la Coordinación de la Investigación Científica de la UNAM, trabaja en este
campo de estudio
·
Cuenta el Instituto de Investigaciones
Aplicadas y en Sistemas de la Universidad Nacional con una base de datos de más
de seis mil políticos
·
También en la Facultad de Ciencias Políticas
y Sociales analizan este tipo de conocimiento
El estudio de las redes sociales es una herramienta poderosa que
permite explicar las transformaciones dentro de un grupo social, político,
económico o científico afirmó Jorge Gil Mendieta, secretario académico de la
Coordinación de la Investigación Científica de la UNAM.
El también investigador del Instituto de Investigaciones en Matemáticas
Aplicadas y Sistemas de la máxima casa de estudios agregó que "aunque no
es un instrumento predictivo, proporciona elementos para poder imaginar
diferentes posibilidades de futuro".
Con sólo unos cuantos elementos, indicó, se puede encontrar a los
líderes reales de un grupo de individuos y describir su comportamiento. "Y
no se necesita tener la biografía completa de las personas; con información
pública exclusivamente se pueden encontrar los diferentes grupos asociados en
un proyecto o programa específico y ver cómo se perfilan"
Lo más extraordinario, añadió, es que se puede contar con la
representación gráfica de las relaciones de estos grupos, "y corroborar
que efectivamente a lo largo del tiempo hay algunos que se han mantenido".
A veces, dijo, "uno piensa que las cosas ocurren por azar, pero con esta
herramienta es posible escudriñar con cuidado todas las conexiones
existentes".
Normalmente, aclaró, "el ser humano no puede ver más allá de unas
cuantas variables, y si uno tiene cientos o miles no se puede hacer el análisis
rápido de ellas y llegar a una conclusión al respecto en poco tiempo. Además,
es muy importante conocer sus raíces, su evolución".
En el mundo, prosiguió, existen alrededor de 24 laboratorios
especializados en análisis de gráficas, orientados a diferentes aplicaciones,
siendo relativamente pequeño ("debemos ser entre 300 y 400 personas")
el grupo que se dedica a estudiar las redes sociales.
En el IIMAS, precisó, lo que se comenzó a hacer hace una década fue
iniciar el estudio de una red complicada, la red política en México,
"porque generalmente los casos que se tratan son de 10 personas o
compañías, 10 nodos diferentes". Lo anterior, consideró, "es
interesante, pero tiene ciertas limitaciones porque no resuelve un problema
complejo ".
Lo primero que hicieron en relación con ese trabajo fue formar una gran
base de datos, la cual actualmente tiene información de seis mil personajes.
Entre las 16 variables que manejan se encuentran las siguientes: lugar y fecha
de nacimiento, nombres de los padres, lugares donde estudió y en donde ha
trabajado, cuándo se inició en la política, a qué partido pertenece y cuáles
han sido los cargos que ha ocupado a lo largo de su vida profesional.
La idea central, sostuvo, es ver cuál fue la evolución de cada uno de
los grupos políticos, cómo se asociaron, cuáles son los más poderosos y por
qué. También, aseguró, tienen bases de datos de académicos, empresarios y
hombres de negocios. “En el futuro –recalcó– queremos tener, y ya casi lo
logramos, un sistema experto”.
Por su parte, Alejandra Salas Porras, coordinadora del Posgrado en
Relaciones Internacionales de la UNAM, abundó sobre el tema, respecto al cual
destacó que el análisis de redes es un instrumento analítico a través del cual
se estudian interacciones de distinto tipo, su intensidad, dirección y la
centralidad de algunos actores.
“Se puede utilizar con muy diferentes
propósitos y se basa en una teoría matemática, la de grafos, y a partir de ella
hay muchas posibilidades de medir esas relaciones sociales”, acotó.
En particular, aplica esta herramienta para el análisis de las
relaciones de los grandes empresarios. “Lo importante es ver cuáles son los
cambios que se han dado en las diferentes etapas de desarrollo de este sector
en México, cuáles son los cambios que ha habido en sus patrones de
comportamiento”.
Una de las cosas que ha observado hasta el momento es que la red
corporativa está muy centralizada; ciertas empresas tienen un papel
fundamental, como los bancos, y que la estructura de esta red ha sufrido
cambios muy importantes con el tiempo.
En 1981, antes de la nacionalización bancaria, hizo un primer análisis;
luego en 1987, cuando los bancos estaban en manos del Estado; posteriormente en
1992, después de la privatización, y en 1997, después de la crisis bancaria.
A partir de este último momento, afirmó, “se observa un proceso de
desarticulación de la red, lo que significa que los grupos que antes estaban
muy conectados con los bancos tienden a desconectarse, lo cual, en parte,
obedece a que para 1997 inicia la compra de varios bancos por instituciones
extranjeras”. Ahora le interesa ver qué ocurre a raíz de este proceso.
Inclusive intentará ver cómo se articula la red mexicana con una red
extranjera.
Asimismo, comentó que las redes son un recurso social que pueden
utilizar, por ejemplo, los marginados, los inmigrantes, para ver cómo se
colocan las personas en los trabajos, y saber cuáles son sus contactos, y cómo
se apoyan mutuamente.
Análisis de este es un tipo, concluyó, tienen muchas aplicaciones, “de
hecho estamos tratando de estimular y fomentar su aplicación en el posgrado.
Por ello iniciaron un taller al respecto relativo a cómo se estructuran las
relaciones sociales.
-o0o-
Foto 1
Alejandra Salas Porras,
coordinadora del Posgrado en Relaciones Internacionales de la UNAM, destacó la
importancia de las redes sociales como herramienta de estudio de las
sociedades.
Foto 2
El Instituto de
Investigaciones Aplicadas y en Sistemas de la UNAM, cuenta con una base de
datos de más de seis mil personajes
para estudiar las redes sociales, informó el investigador Jorge Gil
Mendieta.