Boletín UNAM-DGCS-761
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TÉCNICA NUCLEAR APLICADA EN LA UNAM PARA DETERMINAR
PROCEDENCIA Y FECHAMIENTO DE CERÁMICA
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El grupo de trabajo
está integrado por investigadores de la Universidad Nacional y de instituciones
educativas de Estados Unidos y Canadá
·
Colaboran con
museos canadienses para determinar la autenticidad de sus colecciones de urnas
zapotecas
Investigadores universitarios, en
colaboración con homólogos de otras instituciones de educación superior del
país, Estados Unidos y Canadá, aplican novedosas técnicas nucleares (Pixe),
difracción de rayos X, termoluminiscencia y análisis arqueológicos, para
determinar la procedencia y fecha de elaboración de la cerámica prehispánica
localizada en la Sierra de Juárez, en Oaxaca.
El grupo interdisciplinario de
científicos encabezado por especialistas del Instituto de Investigaciones Antropológicas
(IIA) de la UNAM, único equipo en el mundo en aplicar estas técnicas, colabora
con los museos Real de Ontario y Gadiner, de Canadá para determinar la
autenticidad de colecciones de urnas zapotecas.
En este proyecto participan además de los
investigadores especialistas del Instituto de Física (IFUNAM), así como de las
facultades de Filosofía y Letras (FFL), Química (FQ), y de Ciencias (FC), y de
la Universidad de las Américas (UDLA), de Puebla, la Pennsylvania State
University, de Estados Unidos, y el Royal Museum, de Canadá.
En entrevista, Luz Lazos Ramírez,
investigadora del IIA, explicó que las metodologías que se aplican en esta
investigación, en particular los procedimientos nucleares, a través del
acelerador de partículas pelletrón del IFUNAM, no sólo es aplicable para el
análisis de cerámica prehispánica, sino también en hueso, metal, pintura de
caballete, e incluso papel.
Destacó que el acelerador de partículas
pelletrón, instrumento que sólo existe en la UNAM, permite la reducción de muestras
necesarias para este estudio y reduce el costo del procedimiento. Esta técnica
es bastante accesible y brinda calidad y rapidez en la información, aspectos
que la convierten en una técnica idónea para este tipo de análisis, sobre todo
cuando se habla de piezas con valor artístico.
Esta metodología, indicó, permite
determinar la autenticidad y época en que se produjeron las piezas a estudiar.
En el futuro, estos procesos permitirían a la Universidad Nacional apoyar a
muchas instituciones que requieren de estos servicios.
La arqueóloga Edith Ortiz Díaz, también
de IIA, dijo: tradicionalmente se han aplicado diversas metodologías para el
estudio de material cerámico. Sin embargo, es la primera ocasión que un grupo
interdisciplinario se aboca a un problema arqueológico particular. “Trabajamos
con técnicas que permitirán caracterizar el material cerámico de la Sierra de
Juárez, en Oaxaca, y configurar un banco de datos con la información obtenida”,
indicó.
Mediante este protocolo de investigación
–financiado por la Dirección General de Asuntos del Personal Académico (DGAPA)
de la UNAM y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt)–, se logró
el establecimiento de una metodología para constatar la autenticidad de los
materiales de colecciones de arte prehispánico.
En particular, los investigadores, bajo
la coordinación del antropólogo universitario Jaime Litvak, analizan urnas
zapotecas para determinar la autenticidad y procedencia de la cerámica de esa
región de Oaxaca, mediante la caracterización de la composición de las arcillas
con que fueron elaboradas. Las cerámicas recolectadas en la zona son
diagnósticadas para determinar con exactitud si las piezas cerámicas fueron
comerciadas de un lugar a otro o sólo se podían encontrar en ese sitio, así
como características tales como color, decoración, zonas y fechas de
elaboración.
Además, destacó la especialista, es
importante saber la composición material de éstas para saber si esa cerámica se
movió de un sitio a otro o bien la técnica fue copiada por otros grupos de la
región.
Al respecto, explicó que en ciertos
momentos resulta más fácil copiar la idea, la moda o el tipo y fabricarlo con
arcillas locales. De ahí la importancia de describir las características
físicas de la pieza y el estilo, así como saber si fueron comerciadas, o no,
como objetos.
Las técnicas de pixe, difraccion o
termoluminiscencia, contribuyen a la obtención de mayor información al
respecto, lo que permite confirmar o desechar estas relaciones de comercio e
intercambio de cerámica prehispánica de esa región al norte de la cual contaba
con poco investigación arqueológica.
Aseveró que el Museo Real de Ontario,
cuenta con una colección grande de urnas zapotecas. La interacción con ellos,
dijo, nos permite corroborar nuestras hipótesis acerca de los centros de
producción cerámica en la época prehispánica y verificar si corresponden a los
centros de producción.
Además de determinar su autenticidad y
composición, así como la temporalidad. Cuando se trata de piezas originales,
nos permite saber en qué fechas fueron elaboradas, con qué materiales, estilos,
etcétera.
Además, concluyó, esta colaboración con
los museos canadienses da la pauta para conocer el porcentaje de piezas
auténticas o falsas de sus colecciones.
Al respecto, Luz Lazos señaló que se
estimaba que cerca del 30% de las piezas de uno de los museos canadienses a
analizar son falsas. “El problema era identificar cuáles”.
Se trata de una colección vendida al gobierno
de Canadá en 1919, de las cuales, hasta el momento “hemos encontrado un 10% de
las piezas falsas, lo curioso es que se trata de falsificaciones hechas a
partir de piezas originales”, concluyó.
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Pie de foto
Luz Lazos y Edith Ortiz Díaz, investigadoras del Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM, participan en un proyecto de investigación mediante el cual aplican técnica nuclear para determinar procedencia y fechamiento de cerámica.