Boletín UNAM-DGCS-616
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Pies de foto al final del boletín
SOSLAYADA, LA POLITICA AMBIENTAL DEL DESARROLLO ECONÓMICO
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Destacaron investigadores del IIEc durante la presentación del libro Los terrenos de la política ambiental en
México
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La actual administración aún no encuentra el camino en el rango
ambiental, señaló Javier Delgadillo Macías
En México, la
política ambiental prácticamente ha estado ausente en términos del desarrollo
económico, lo cual implica la inexistencia de normatividad adecuada que haga frente
al deterioro ecológico señaló Felipe Torres Torres, investigador del Instituto
de Investigaciones Económicas (IIEc).
En el marco de la
presentación del libro Los terrenos de la
política ambiental en México, efectuada en la Facultad de Ciencias Políticas
y Sociales (FCPyS). Javier Delgadillo Macías, también del IIEc y coordinador
del ejemplar apuntó que debe considerarse la situación del país dentro de una
etapa de transición administrativa donde el tema ambiental todavía no encuentra
el camino a seguir.
Felipe Torres destacó que la ausencia de una política
ambiental se ha tratado de corregir a través de dos criterios: uno de tipo proteccionista, en el sentido de dejar espacios resguardados de
los efectos del desarrollo económico y otro vinculado a la política económica,
bajo la lógica de pagar impuestos de acuerdo a la destrucción de los recursos
naturales.
Estos dos enfoques
de la política ambiental en el país tienen serias limitaciones y la vuelve
frágil porque no consideran la nueva
fase en que entró la economía nacional, aunada a la ausencia de medidas
regulatorias que protejan de los embates internacionales de desarrollo, dijo
Torres.
Felipe Torres
subrayó que ante el escaso desarrollo del país y en un contexto de recesión, la inversión extranjera se ha
convertido en pilar determinante para el desarrollo, sin embargo, agregó, no
hay regulación clara que permita proteger los recursos.
Opinó que en
México existe un panorama muy incierto en materia ambiental, pues la
inversión se concentra en las mismas
áreas que han sido la fuente constante de contaminación.
Argumentó Felipe
Torres que “en el caso de la agricultura, la actividad se ve como una de las
principales fuentes de contaminación, más del 85% de los problemas de
deterioro están asociadas a este
sector, pero eso es causa de las políticas en que se maneja el sector”.
Y agregó: se
considera que dos terceras partes del suelo en territorio nacional se
encuentran en proceso de desertización, lo cual es grave toda vez que restringe
cada vez más las áreas agrícolas y en cuanto al agua, se tiene también un alto
grado de contaminación, aunado al agotamiento del vital líquido, concluyó.
Javier Delgadillo
comentó que una de las estrategias que desde hace tiempo plantea el IIEc, como
avance o necesidad de reconocimiento de los grandes problemas nacionales, tiene
que ver con el medio ambiente y el desarrollo regional.
Apuntó que el tema
de los problemas del medio ambiente juega un papel relevante respecto del
devenir del país por lo que el libro que se presentó es una obra colectiva
donde se da cuenta de diversos datos así como la relación del deterioro y los
entornos territoriales del país.
Opinó Javier
Delgadillo que la transición política, desde el ámbito de la academia, todavía no demuestra claramente
cuáles son las estrategias que se van a implementar, más allá de aquellas que son norma establecida desde
hace diez años y que tienen que ver con los mecanismos de administrar las áreas
naturales.
Hay una serie de
problemas, abundó, que son necesarios tomar en cuenta para poder prevenir en lo
inmediato los efectos negativos de las políticas económicas y sociales así como
los de carácter natural.
En el libro, dijo,
se intenta destacar la corresponsabilidad que tienen los organismos federales en relación con las políticas generales del
país respecto al tema ambiental; “de qué manera hay responsabilidad no sólo de
la sociedad y los agentes económicos sino el gobierno en sus tres niveles sobre
actos como la producción de alimentos, captura de mar, explotación de recursos
forestales y el uso sustentable de los recursos no renovables”.
Aunado a lo
anterior, agregó Javier Delgadillo, se tiene el problema de los fenómenos
naturales, toda vez que el país se
encuentra inmerso en una relación perversa entre políticas aplicadas no
planificadas para el territorio nacional, el crecimiento demográfico desmedido
en algunas regiones del país, y la continuidad de los fenómenos naturales en
gran parte del territorio nacional.
México, destacó,
es un país altamente vulnerable no sólo
en términos de fenómenos naturales sino por la agudización en la distribución
de la riqueza por lo que deben
establecerse criterios y políticas de defensa para que por un lado, se
mitiguen los efectos y por otro, atender de manera preventiva las consecuencias
derivadas de los fenómenos naturales.
José Gasca Zamora,
miembro del IIEc, por su parte, subrayó que en términos de política ambiental,
hasta la fecha han sido insuficientes
los esfuerzos al tiempo de lamentar que México tenga aún, un carácter subordinado –en términos ambientales- frente
a sus socios comerciales Canadá y Estados Unidos, pero principalmente a éste
último.
El investigador
señalo que existe un problema normativo de los programas y marcos regulatorios
donde se desconocen las responsabilidades o sanciones “que poco tienen que ver
con el abatimiento de la problemática”.
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Pies de Foto
La política ambiental en México no se toma en
cuenta dentro de los planes de desarrollo económico, se señaló en
teleconferencia realizada en la facultad de Ciencias Políticas de la UNAM
Los investigadores José Gasca Zamora, Javier
Delgadillo Macías y Felipe Torres Torres, durante la presentación en la UNAM
del libro Los terrenos de la política ambiental en México