Boletín
UNAM-DGCS-540
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EXAMINAR EL GENOMA DE LOS ORGANISMOS VIVOS CREA NUEVOS PROBLEMAS CIENTÍFICOS, LEGALES Y SOCIALES
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La biotecnología, estratégica para países megadiversos, como México:
Francisco Bolívar Zapata
· Deben existir límites en el manejo de la información genética, dice
La actual es una
época verdaderamente extraordinaria. Vivimos el nacimiento de un nuevo
paradigma: examinar el genoma de los organismos vivos, incluido el nuestro, nos
enfrenta a nuevas problemáticas desde
el punto de vista científico, legal y social, aseguró Francisco Bolívar Zapata.
El investigador del Instituto de Biotecnología (IBT) de la UNAM, en la
conferencia Las ciencias genómicas y su impacto en la medicina y la salud,
organizada dentro de los festejos por el 85 Aniversario de la Facultad de
Química, explicó que existen muchas demandas y retos por resolver para que la
sociedad mexicana tenga una vida digna.
Una oportunidad importante para enfrentar muchos de ellos es la
biotecnología, la cual, especialmente en nuestro país, resulta no sólo de
fundamental importancia, sino estratégica, por tratarse de una nación rica en
biodiversidad.
México es uno de los países más ricos en cuanto a organismos vivos en
todo el mundo y “si usamos de forma adecuada, de manera sustentable y
respetuosa esta biodiversidad, donde se encuentran las plantas medicinales y
otros organismos con propiedades, podremos generar mejores alimentos,
tecnología que no contamine, así como fármacos de manera mucho más rentable y
económica”.
Aseguró
que México, al igual que los países desarrollados, puede hacer investigación de
calidad que propicie la elaboración de productos mucho más baratos, incluso con
un valor agregado.
Tal sería el caso de muchos productos naturales “que tenemos en el
país y que no poseen en otros lugares”, los cuales, además de contribuir a
resolver problemas propios, podrían ser exportados.
En opinión de Bolívar Zapata existe, en la industria, la biotecnología
y la biodiversidad, “una posibilidad de convertirnos en un país desarrollado,
resolver nuestros problemas y generar fuentes de trabajo”.
Las técnicas de ingeniería genética y el conocimiento del genoma
humano ya están aquí y “nos incorporan en una época completamente nueva donde
es muy importante que cada uno de nosotros sea dueño de su propia información
genética”.
Al respecto señaló que ningún tipo de experimento genético debería
plantearse mientras no haya un consentimiento y conocimiento claros por parte
del individuo que dona su material genético, el cual debe saber para qué se
utilizará.
Por ello es necesario legislar de forma tal que el uso de esa
información, relativa a la privacidad genética y biológica de cada individuo,
quede perfectamente limitada. De ahí, reiteró, la importancia de retomar el
concepto de autorización del individuo donante.
Se debe asegurar que esa información será utilizada en el contexto
adecuado, y no para asegurar o dar trabajo a alguien; esto podría dar origen a
problemas de discriminación muy importantes, agregó.
La sociedad mexicana y “los universitarios que trabajamos en esto,
tenemos la responsabilidad de divulgar y de crear conciencia acerca de estos
temas”, añadió.
Entraremos a una época en la cual se deberá discutir, con la
participación de la sociedad y de manera intensa, cuáles serán los límites del
manejo de la información genética, quién va a tener derecho a utilizarla, bajo
qué situación y la penalidad que deberán enfrentar quienes infrinjan las reglas
de la privacidad genética de cada uno, finalizó.
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Pies de foto
Francisco
Bolívar, investigador del Instituto de Biotecnología, afirmó que cada persona
debe ser dueña de su información genética