Boletín UNAM-DGCS-470
*Pies de Fotografías al final del Boletin
EL MODELO NEOLIBERAL ACENTÚA EL AMBULANTAJE; EN EL DF, 6 MIL 800
VENDEDORAS
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0btienen hasta dos salarios mínimos
por día: Julia del Carmen Chávez, de la Escuela Nacional de Trabajo Social
·
Contra lo pensado, no sólo mujeres
indígenas forman parte del comercio callejero; también las de clase media
En la ciudad de México hay más de seis mil 800
mujeres dedicadas al ambulantaje, como resultado del deterioro en las
condiciones de vida de sus familias, el desempleo y la crisis económica,
ocasionados por el modelo neoliberal, advirtió la académica de la Escuela
Nacional de Trabajo Social (ENTS) de la UNAM, Julia del Carmen Chávez.
Aunque este grupo no se ubica dentro de los
índices de mayor pobreza, precisó, requiere de los ingresos de su trabajo para
subsistir a pesar de que no rebasan los dos salarios mínimos. En cambio, se
convierte en un sector de alto riesgo social en los ámbitos laboral y familiar.
Con la mujer, también los hijos -dos en
promedio, niños y jóvenes- se enfrentan a una situación de riesgo debido al
descuido familiar. Pasan gran parte de su vida en la vía pública o solos y sin
control en casa; ingieren alimentos antihigiénicos; limitan sus habilidades
intelectuales por falta de guía y además se presenta una constante deserción
escolar porque, en la mayoría de los casos, únicamente cursan la primaria, y
manifestan serias actitudes de agresión.
En conferencia de prensa, la coordinadora del
Centro de Estudios de la Mujer de la ENTS dio a conocer los resultados de la
investigación que la dependencia universitaria realizó sobre la mujer
ambulante, mediante una encuesta efectuada a 500 féminas de organizaciones e
"independientes" de las delegaciones políticas de Azcapotzalco,
Iztapalapa, Venustiano Carranza, Gustavo A. Madero Cuauhtémoc.
También fueron entrevistadas mujeres ambulantes
de las zonas aledañas a las paradas de las estaciones del Metro Tacuba, Salto
del Agua, Indios Verdes, Martín Carrera, San Lázaro, Canal del Norte y
Revolución, así como del Centro Histórico, la colonia San Felipe de Jesús, las
avenidas Eduardo Molina y Canal del Norte, Alameda Central y Eje 3 Norte.
De acuerdo con las conclusiones de la
investigación, la doctora Julia del Carmen Chávez informó que en el sector informal
no sólo ingresan mujeres pobres, indígenas y campesinas, sino de clase media y
media baja, quienes por lo general se dedican a comercializar utensilios
domésticos y cosméticos.
El 53 por ciento aporta el 100 por ciento de su
ingreso al gasto familiar; el horario de trabajo de ocho horas diarias es del
42 por ciento; el principal giro comercial a que se dedican es el de alimentos
con 46 por ciento, y le siguen ropa, joyería y regalos, zapatos y artículos de
piel, así como cosméticos y artículos religiosos. Todos dedicados a la mujer.
En 100 por ciento se enfrenta a la delincuencia
organizada al ser víctima sobre todo de robo y asalto, y a la corrupción, y el
80 por ciento a problemas de salud, situaciones que se extienden al resto de la
familia.
Sin embargo, aclaró, se dedican al ambulantaje
debido a que el horario es flexible, no hay rigidez en la forma de trabajo ni
requiere capacitación y menos aún se necesitan requisitos para laborar.
La mayoría de las ambulantes son mujeres
jóvenes: el 37 por ciento tiene entre 34 y 38 años; y el 44 por ciento de 24 a
33 años. En cuanto a la escolaridad, el 49 por ciento tiene estudios de
secundaria, mientras que el de sus esposos representa el 45 por ciento.
El 67 por ciento de estas mujeres tienen
pareja; el 33 son jefes de familia; el 55 por ciento es propietaria del puesto;
22 por ciento es por préstamo, y el ocho por ciento empleadas. Es decir, los
dos últimos porcentajes, el 30, demuestran que en el ambulantaje se presentan
situaciones ocultas y, por tanto, de corrupción.
La funcionaria universitaria abundó que una
tercera parte de las encuestadas dijo tener siete años en el ambulantaje,
mientras otra cantidad similar más de tres.
Respecto a la violencia intrafamiliar, dijo que
el 74 por ciento de las entrevistadas reportó que padece estos problemas ya sea
con la pareja o los hijos.
Julia del Carmen Chávez advirtió que si
continúa el actual modelo económico y no se impulsan mecanismos para controlar
esta problemática, el ambulantaje se volverá una situación de alto riesgo para
el desarrollo social del país.
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PIES DE FOTO
FOTO1
La coordinadora del
Centro de Estudios de la Mujer de la Escuela Nacional de Trabajo Social de la
UNAM, Julia del Carmen Chávez, en conferencia de prensa
FOTO 2
Julia del Carmen Chávez,
de la Escuela Nacional de Trabajo Social de la UNAM, dijo que el incremento de
mujeres vendedoras ambulantes es consecuencia del deterioro de las condiciones
de vida de sus familias