Boletín UNAM-DGCS-411
·
Demuestra que el banco central
ejerce plenamente su autonomía, aseguró el catedrático de la FE
·
El crecimiento económico de nuestro
país en el presente año se ubicará entre el 3.2 y el 3.5 por ciento, manifestó
La diferencia de opinión entre el
presidente de la República y el gobernador del Banco de México en torno a las
cifras del crecimiento económico para este año muestran que el país es más
abierto y democrático afirmó Eduardo Loría Díaz, catedrático de la Facultad de
Economía (FE) de la UNAM.
La discrepancia entre el gobierno federal y el banco central, explicó, es
producto de la autonomía que éste ejerce y no significa que haya desacuerdos ni
problemas de comunicación entre ambas instancias.
Es positiva la divergencia de opiniones en
torno al porcentaje de crecimiento estimado para nuestro país en el presente
año, indicó, ya que no se tradujo en fuga de capitales, inestabilidad
financiera ni presiones cambiarias, lo cual significa que no generó nerviosismo
en los mercados.
Loría Díaz considera que el crecimiento de la
economía en México sea de entre el 3.2
y el 3.5 por ciento, de acuerdo a las proyecciones realizadas en nuestro país y
en Estados Unidos.
Estas estimaciones, sostuvo, se basan en
cálculos que ubican el crecimiento económico del vecino país del norte en poco
más del uno por ciento, con una inflación de entre el 1.5 y 1.6 por ciento, así
como en la estimación que el precio del petróleo se situará en 18.7 dólares el
barril.
Si la economía norteamericana creciera por
encima del porcentaje indicado, señaló el catedrático de la FE, podría
significar un aumento de las exportaciones mexicanas hacia ese país.
Al mismo tiempo el tipo de cambio, que
actualmente fluctúa en 9.65 pesos en promedio, podría colocarse en 9.8 pesos
por dólar estadounidense, precisó.
En consecuencia, estima, el máximo que podría
crecer la economía mexicana es un 3.5 por ciento, mientras que el mínimo sería
del 3.2 por ciento, cifras que no son pesimistas pues implican que México se
mantendría por encima del promedio latinoamericano.
En cualquiera de los dos escenarios, aseguró,
la inflación sería de entre siete y 7.3 por ciento, índice que México no ha
tenido durante décadas. Además, destacó que de haber distribución equitativa
del ingreso, el producto per cápita
se incrementaría entre el 1.5 y 1.8 por
ciento.
Con respecto al empleo, Loría Díaz expresó que
crecerá aproximadamente uno por ciento, cifra aceptable de acuerdo con el
contexto internacional.
Sin embargo, continuó, por la dinámica
demográfica en nuestro país es preciso que el empleo crezca el 3.95 por ciento
para abatir la tasa de desempleo.
El catedrático universitario calificó como
positiva la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, al declarar
inconstitucional la cláusula de exclusión en los contratos colectivos de
trabajo, ya que la medida permitirá
mayor movimiento en los mercados laborales.
-- o0o --