Boletín UNAM-DGCS-332
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CONTRIBUIRÁ A SOLUCIONAR
PROBLEMAS EL LABORATORIO UNIVERSITARIO DE PETROLOGÍA DE LA UNAM
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La UNAM genera programas, espacios y
acciones para rescatar áreas con rezago, como la petrología y la mineralogía:
René Drucker
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México, país con
extremada diversidad y riqueza geológica: Dante Morán, director del Instituto
de Geología
La UNAM está atenta a los grandes problemas nacionales y a proponer que
deben realizarse para resolverlos, porque cuenta con el personal más calificado
aseguró el coordinador de la Investigación Científica de la UNAM, René Drucker
Colín.
Esta casa de estudios, precisó, genera programas, espacios y acciones
para apoyar a las áreas en donde existe rezago, por lo que el Laboratorio
Universitario de Petrología (LUP), recientemente inaugurado en las
instalaciones del Instituto de Geofísica (IGf), debe ser ejemplo de lo que la
Universidad hace y puede efectuar.
Asimismo, Drucker Colín destacó la importancia del financiamiento del
programa UNAM-BID (Banco Interamericano de Desarrollo) para proyectos como el
LUP, el cual también permitió la construcción del edificio anexo del IGf, en
cuya planta baja se ubica el nuevo laboratorio.
El
director del IGf, Jaime Urrutia, explicó que el LUP forma parte de los
esfuerzos de los institutos de la Investigación Científica por contar con
facilidades analíticas compartidas. “Este es el camino a seguir, sobre todo
cuando se trata de inversiones de altos costos”.
El
nuevo espacio de investigación será manejado por el propio IGf y el Instituto
de Geología (IGL), mediante la colaboración formalizada con el convenio firmado
en el mismo acto.
El
LUP se suma al Laboratorio Universitario de Geoquímica Isotópica, y se
encaminará a la parte de docencia y formación de recursos humanos. De ese modo
estaría abierto a estudiantes y profesores de la Facultad de Ingeniería (FI).
Añadió
que debido a que el LUP tiene la capacidad de ser manejado en forma remota, se
piensa aprovechar con investigadores localizados fuera de la ciudad de México.
A
su vez, Dante Morán, director del IGL, expresó que el Laboratorio Universitario
de Petrología impulsará la cultura de esta ciencia en México, país con
extremada diversidad y riqueza geológica.
Los
problemas de orden petrológico en nuestro país, abundó, son de gran importancia
científica y práctica, uno de ellos es el de los volcanes activos. “El registro
geológico volcánico antiguo es extraordinario y tenemos una de las provincias
de vulcanismo explosivo más grandes del planeta: la Sierra Madre Occidental, a
la cual se asocian gran cantidad de yacimientos minerales”.
El LUP es otro ejemplo de la colaboración entre ambas dependencias
universitarias que se suma a la biblioteca conjunta de Ciencias de la Tierra,
el posgrado en el área y la Unidad Multidisciplinaria de Juriquilla, añadió.
Finalmente, Hugo Delgado, investigador del IGf, detalló que la petrología y la mineralogía, rezagadas
dentro de las ciencias de la tierra, se rescatarán y desarrollarán. El LUP será
el eje de progreso de esos campos en el nivel básico y aplicado dentro de la
Universidad Nacional.
El Laboratorio, cuyo costo es de aproximadamente un millón de dólares,
cuenta con equipo instrumental para llevar a cabo sus trabajos, como la
microsonda electrónica de barrido con un microscopio electrónico, tres veces
más potente que el que posee en la actualidad del IGL.
Asimismo, tiene microscopios ópticos esteroscópicos y de polarización,
cámaras fotográficas ópticas digitales para mejor registro de las muestras y
computadoras para diferentes funciones, incluido un sistema de protección
cibernético donde la información se resguarda para luego distribuirla a los
diferentes usuarios. También cuenta con paquetería para captura y procesamiento
de imágenes microscópicas.
Tiene líneas de investigación propias, como el magmatismo de la franja
volcánica transmexicana, de gran interés ya que nuestro país posee infinidad de
volcanes, así como el estudio de meteoritas y rocas asociadas a los impactos
meteoríticos.
Delgado informó que además de la posibilidad de colaborar con el
Consejo de Recursos Minerales, podrían participar instituciones como el Centro
de Investigación y Estudios Superiores de Ensenada para analizar rocas
volcánicas de Baja California y el Centro Nacional para la Prevención de
Desastres en el análisis de los materiales que arroja el volcán Popocatépetl.
Las cenizas que antes eran enviadas al extranjero podrían ser estudiadas dentro
de la propia Universidad.
A la ceremonia, efectuada en el auditorio del edificio anexo del IGf
asistieron Sergio Almazán, director del Consejo de Recursos Minerales; Gerardo
Ferrando, director de la FI, y Juan José Sánchez Rueda, director del programa
UNAM-BID.
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