14:00 hrs. Febrero 20 del 2001


Boletín UNAM-DGCS-161

 

IMPRECISO QUE LAS CIENCIAS SOCIALES Y LAS HUMANIDADES TENGAN POCA UTILIDAD: ROSAURA RUIZ

 

 

·        La directora general de Estudios de Posgrado de la UNAM aclaró que esas áreas del conocimiento tienen beneficios prácticos

·        Desde sus inicios la Antropología tiene un papel central en nuestro país: Liliana Weinberg

·        Socializar el conocimiento antropológico permite contrastar hipótesis y metodologías: Linda Manzanilla

 

Las ciencias sociales y las humanidades sí tienen beneficios prácticos para el país y son útiles para reflexionar acerca de nuestra cultura e historia aclaró la directora general de Estudios de Posgrado de la UNAM, Rosaura Ruiz, al considerar que quienes señalan que esas áreas del conocimiento tienen poca utilidad revelan su ignorancia sobre la importancia de estos campos

 

Al inaugurar el Coloquio de Posgrado en Antropología, dentro de las Jornadas Académicas de Posgrado –que se efectúan todos los días y concluirán el 27 de febrero-, criticó a quienes “hablan con tal facilidad e irresponsabilidad respecto de las ciencias sociales y las humanidades”.

 

 

En el acto, organizado de manera conjunta por la Facultad de Filosofía y Letras (FFL) y el Instituto de Investigaciones Antropológicas (IIA), Liliana Weinberg, jefa de la División de Estudios de Posgrado de la FFL, indicó que desde sus inicios en México la Antropología desempeña un papel central toda vez que se cuenta con un amplio sistema integrado por centros de investigación, enseñanza y vinculación, museos, sitios arqueológicos y laboratorios, así como el vasto campo de acción de los distintos especialistas en antropología física, social, arqueología y etnología, entre otras.

 

Agregó que la función de la Antropología, al igual que el resto de las disciplinas sociales, artísticas y humanísticas, es fundamental porque está ligada a la generación de categorías del conocimiento y al hecho de aprender a pensar, investigar, argumentar, leer, y escribir con fundamentos, "requisitos para la formación de verdaderos ciudadanos y no sólo consumidores del conocimiento”.

 

"Si insistimos en que nuestras disciplinas enseñan a pensar y a resolver problemas nuevos de manera autónoma y sistemática, no es necesario decir algo más en cuanto a sus aportes”, aseveró Weinberg.

 

Señaló que el diálogo, la generación de la comunidad intelectual y la densidad de las discusiones son algunos de los motores del conocimiento.

 

A su vez, Linda Manzanilla, directora del IIA, recordó que desde hace diez años los antropólogos inauguraron los coloquios de posgrado, con el fin de discutir entre colegas los resultados de investigación de quienes comienzan la vida académica en la indagación antropológica.

 

Esta modalidad de socializar el conocimiento antropológico es rica en resultados y permite contrastar hipótesis y metodologías entre profesores y estudiantes.

 

Detalló que el posgrado en Antropología de la UNAM se distingue porque busca rescatar la antropología integral, la etnología, arqueología, lingüística antropológica y la antropología física articulados en la investigación y en el quehacer científico.

 

En tanto, Rosaura Ruiz destacó las cualidades de las ciencias sociales porque enseñan a pensar a los estudiantes y los proveen de nuevos enfoques de los objetos de estudio. Por ejemplo, dijo, podemos pensar por qué somos así los mexicanos o tratar de explicar por qué una cultura se desarrolló de tal o cual forma.

 

Como una de las utilidades prácticas de las investigaciones en esa área del conocimiento, Rosaura Ruiz mencionó el convenio entre el IIA y la Procuraduría General de la República para la reconstrucción de la cara del mexicano y diseñar retratos hablados.

 

En cuanto al posgrado en Antropología, la titular de la DGEP reconoció que es un modelo a seguir, además de ser de los primeros adecuados al nuevo reglamento de la UNAM, lo cual lo ubica como un posgrado de alto nivel académico y de excelencia.

 

Asimismo, explicó que uno de los propósitos de las Jornadas Académicas es atraer al mayor número de estudiantes de licenciatura a los programas, a fin de conocer el trabajo de estudiantes y tutores de este nivel de estudios. “Queremos promover el posgrado no sólo con carteles y anuncios, sino con el trabajo de quienes participan en él", puntualizó.

 

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