06:00 hrs. Noviembre 17 de 2001


Boletín UNAM-DGCS-1125 

 

  

 

 

Pies de Fotos al Final del Boletín

 

EL GOBIERNO, PRINCIPAL CULPABLE DE QUE NO SE APLIQUE LA NORMATIVIDAD AMBIENTAL

 

·        María del Carmen Carmona Lara, académica del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, dijo que a esto se suma la nula valoración del objeto que resguarda: la salud y la vida

·        Participó en el ciclo de conferencias que el Grupo de Estudios Interdisciplinarios en Salud y Derecho del IIJ realizan sobre esa materia

 

En México, la normatividad ambiental no se acata por falta de denuncia y de tradición en su aplicación, debido a la nula observancia, por carecer de interés para exigir la conclusión de los procesos que permitan ponerla en práctica en forma adecuada y porque no se valora el objeto que resguarda: la salud y la vida, afirmó la académica del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM, María del Carmen Carmona Lara.

 

Sin embargo, consideró que la responsabilidad es, sobre todo, de las autoridades gubernamentales, las cuales en un Estado de derecho deben establecer y salvaguardar los índices de gobernabilidad. Uno de ellos tendrá que ser la seguridad ambiental y sanitaria de la población.

 

En el marco del ciclo de conferencias que el Grupo de Estudios Interdisciplinarios en Salud y Derecho del IIJ ofrece sobre esa materia, resaltó que la nula o tardía aplicación de las normas impiden la protección ambiental, a pesar del daño que provocan a la salud de infantes.

 

La especialista en derecho ambiental advirtió que las causas principales por las cuales no se aplica la normatividad del ramo son la ignorancia y la falta de cultura y conciencia sobre las consecuencias generadas por la contaminación en la salud de la población.

 

En el caso del plomo, por ejemplo, subrayó que la mayoría de la gente desconoce que una de las razones por las que los niños pueden tener deficiencia en el aprendizaje es por el alto contenido de este metal en la sangre.

 

En este sentido, dijo, ni siquiera se trata de crear nuevas normas ambientales, sólo de su real aplicación. Es urgente conocer los niveles permisibles de este metal en la sangre y las medidas que se tomarán para evitar esta situación.

 

Aunque son mejores las acciones preventivas, consideró necesario que de presentarse esta problemática se exija a la fuente causante de la contaminación la indemnización, reparación del daño, limpieza de la zona y traslado de los afectados a otro perímetro.

 

Luego de disertar sobre "La actualización normativa en materia ambiental y salud" y de advertir sobre el "negro panorama" en este rubro, la investigadora del IIJ subrayó que no se puede generalizar respecto a la efectividad de la reglamentación, pues se diseña y emite para casos concretos o zonas específicas.

 

El gobierno, puntualizó en el aula de seminarios Guillermo Floris Margadant,  tiene la obligación de emitir las normas ambientales y vigilar su cumplimiento, y la sociedad de conocerlas y exigir su ejecución, y ambos sectores deben respetarlas y obedecerlas.

 

"Pero -arremetió- como en este país las normas se hacen para violarlas y no para obedecerlas, a partir de ahí empieza toda la distorsión”. Nadie hace nada para obtener resultados positivos, el gobierno no controla las emisiones, lo cual origina el incremento de la contaminación.


 

La investigadora del IIJ aclaró que el Distrito Federal no es el más contaminado del país, pero en México se encuentran algunos de los municipios con mayor infición a nivel mundial. Tal es el caso de Minatitlán, Veracruz, localidad con gran actividad petroquímica donde hay un amoniaducto, encima del cual están asentadas más de 47 mil personas.

 

"La pregunta es ¿la gente sabe donde está situada?, el día que haya una fuga de amoniaco ¿qué pasará?, ¿saben para dónde salir corriendo?"

 

Agregó que en México hay rutas de evacuación de incendios, pero no para desalojar cuando se presentan situaciones de emergencia por contaminación. Ni siquiera se cuenta con bomberos ambientales. En esta materia, remató, "todavía estamos en pañales".

 

 

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FOTO 1

 

María del Carmen Carmona Lara, académica del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, dijo que en México la normatividad ambiental no se acata por falta de denuncia y de tradición para su aplicación

 

 

FOTO 2

 

La académica del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, María del Carmen Carmona Lara, participó en el ciclo de conferencias sobre derecho y salud ambiental que se desarrolla en esa dependencia universitaria