Boletín UNAM-DGCS-1064
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El investigador español Felipe Serrano Pérez se pronunció por la
privatización de los servicios de salud; así, la población aprendería a
ahorrar, dijo
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Ofreció la conferencia El nuevo papel del Estado y los sistemas de protección social, en
Palacio de Minería
El objetivo primordial
del Estado en el terreno de la protección social, es brindar procedimientos que
garanticen a las personas que recibirán sus ahorros luego de haber culminado su
vida activa, pero para ello es necesario que tanto el gobierno como los propios
gestores y los asegurados, asuman y exijan sus respectivas obligaciones.
Así lo señaló Felipe
Serrano Pérez, académico e investigador español, en el Palacio de Minería, al
abordar el tema de las pensiones y los fondos de retiro, dijo que es obligación
del gobierno legislar de manera restrictiva el uso de ese ahorro y garantizar
que estén seguros, aunque, apuntó, no basta con eso sino que debe reforzar los
organismos de supervisión y control.
En la vieja idea del
Estado, explicó, se contemplaba la nacionalización de empresas en una primera
etapa y luego la generación de otras en rubros considerados como estratégicos,
al tiempo que mantenía un compromiso
claro y rotundo con la generación de empleos para lo que hacía uso tanto
de la política fiscal como de la monetaria.
Sin embargo, el
proceso de cambio en el quehacer del Estado se ha dado de manera sutil y además
se han generado contradicciones reflejadas en las crisis constantes sostenidas
bajo el discurso del llamado neoliberalismo.
Por ende, dijo, la
culpa de estas crisis recae en la intromisión del Estado toda vez que ha
intervenido en demasía y ha “taponeado las venas del mercado por lo que urge un
cambio en las políticas económicas a través de la privatización de las empresas
públicas, y la desregulación de los mercados a través del fortalecimiento de la
competencia”.
El nuevo Estado
descansa –desde el punto de vista macroeconómico– en el abandono del compromiso
con el empleo y se adopta uno nuevo con la estabilidad de precios, donde el
objetivo es crear un marco duradero que se identifique con la estabilidad de
precios.
Sin embargo, advirtió,
es necesario analizar si este nuevo orden ya está en la línea de agotamiento,
pues existen indicios para sospechar su quiebra y vaticinar la vuelta a viejas
ideas, ya que al parecer, no ha dado los resultados esperados.
Esto quiere decir que
el llamado nuevo Estado ha generado serios problemas de distribución de renta,
tanto dentro de los países como entre ellos mismos.
Este nuevo discurso,
abundó Felipe Serrano, afecta a la protección social pues, desde el punto de
vista discursivo, se plantea una afectación negativa en la economía ya que se
generan contradicciones en una población acostumbrada a no ahorrar.
Los individuos, al
recibir protección social no se sienten incentivados a ahorrar, al no ocurrir
esto, la tasa de ahorro de la economía cae, y al caer también lo hace la tasa
de inversión y al caerse sucede lo mismo con el crecimiento económico, que
redunda en la carencia del empleo, explicó.
Por lo tanto hay
reformar los sistemas a través de la recurrencia a la iniciativa privada: “Si
privatizamos la seguridad social, los individuos se sentirán incentivados a
ahorrar, la tasa de ahorro nacional aumentará, y finalmente, todo ello derivará
en mayor oferta de empleo, y éste es el camino que ha seguido fielmente el
Estado mexicano, bajo la premisa neoliberal”, concluyó.
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