Boletín UNAM-DGCS-1060
LOS PAÍSES DE
MEDIO ORIENTE AÚN NO ALCANZAN SU INTEGRACIÓN
·
Así lo señaló Susana Liberti, de la FCPyS, al participar en la mesa
redonda Estudios regionales
·
Tener esquemas de cooperación exitosos le permitiría a esos países
alcanzar una participación más importante en la política internacional
A pesar de contar con organismos internos de
cooperación como la Liga Árabe, el Consejo de Cooperación del Golfo y la
Organización de la Conferencia Islámica, los países de medio oriente aún no han
alcanzado su integración regional, afirmó Susana Liberti, de la Facultad de
Ciencias Políticas y Sociales.
Al participar en la mesa redonda Estudios
Regionales, realizada en el Palacio de Minería, la internacionalista destacó
que mientras no haya una reforma política interna en Medio 0riente, no se podrá
alcanzar su integración exitosa.
En el acto, realizado en el marco de los
festejos de los 450 años de la Universidad, Liberti indicó que alcanzar la
unificación, le permitiría a los países de medio oriente crear esquemas de
cooperación exitosos, cuyos beneficios podrían reflejarse no sólo en el aspecto
económico, sino en una participación más importante en la política
internacional.
Al mismo tiempo, abundó, contribuirían a
resolver conflictos intraregionales, así como disminuir la posibilidad de
conflictos internos y dar solución definitiva al problema entre Palestina e
Israel.
Explicó que la diversidad de los países de
medio oriente se manifiesta en la variedad de formas de gobierno y sistemas
económicos. “Aunque en esa región se encuentran mayores reservas petroleras y,
por lo mismo, hay países muy ricos, también existen otros con una economía
mucho menos diversificada”.
Además, mencionó, los recursos naturales están
distribuidos de manera desigual, incluso “algunos podrían pensar que el
petróleo es fundamental; sin embargo, en la actualidad el agua es un recurso
que podría ser motivo de enfrentamientos en esa zona”.
Dijo que se trata de una región con 300 millones
de habitantes, cuyo Producto Interno Bruto per cápita en promedio es de 2 mil
40 dólares, lo cual sitúa a muchos de estos países en el renglón de ingresos
medios.
Esto, subrayó, tiene importancia para los
apoyos de las instituciones financieras internacionales. En este sentido, los
esfuerzos de cooperación internacional están dirigidos a desarrollar el sector
privado, modernizar las estructuras políticas e integrar la economía de la
región en el mercado global.
Destacó que en este esfuerzo de la comunidad
internacional por financiar el desarrollo de los territorios ocupados, Estados
Unidos dio, de 1993 a 1998, 500 millones de dólares, “incluso más que el Banco
Mundial”.
En estos momentos, puntualizó, la ayuda
estadounidense está dirigida a la administración de los recursos hidráulicos,
los cuales pueden ser “el talón de Aquiles de las relaciones internacionales”.
Cabe señalar, mencionó, que el mejor receptor
para ayuda bilateral de Estados Unidos es Israel y en segundo lugar Egipto. “En
el caso israelí se trata de transferencia de recursos para pago de deuda e
importación de bienes y servicios estadounidenses”.
En el caso de Egipto, la ayuda de Estados
Unidos ha sido fundamental para mantener su estabilidad. “El propósito es abrir
la economía egipcia e integrarla a los mecanismos globales, aumentar la
competitividad y lograr el fortalecimiento del sector privado”.
Por su parte, Juan Pablo Prado, especialista en
relaciones internacionales, dijo que la cooperación europea, en su dimensión
bilateral, conforma el primer donante de ayuda al desarrollo de escala mundial.
Sin embargo, destacó, la Unión Europea
actualmente se encuentra en un proceso de ampliación y eso le ha generado
importantes cargas políticas, económicas y culturales.
Aún así, enfatizó, por sí misma constituye el
quinto donante de asistencia mundial para el desarrollo. “Su alcance es
prácticamente global debido a la diversificación de esquemas de ayuda con los
que cuenta”.
-o0o-