Boletín UNAM-DGCS-1055
MÉXICO, PAÍS CON VOCACIÓN DEMOCRATICA PERO SIN PRÁCTICA POLÍTICA: VENEGAS TREJO
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La democracia representativa es difícil de alentar en países como el
nuestro, en donde las peculiaridades sociales, económicas, políticas y
culturales no permiten todavía la democracia, indicó
México tiene vocación democrática, siempre se
ha pronunciado por ella en la teoría jurídica; sin embargo, a pesar de que sus
constituciones han sido democráticas y consagran la separación de poderes, en
la práctica política no es así, afirmó Francisco Venegas Trejo, director del
seminario de Derecho Constitucional de la Facultad de Derecho (FD) de la UNAM.
La democracia representativa es difícil de
alentar en países como el nuestro, en donde las peculiaridades sociales,
económicas, políticas y culturales no permiten todavía la implantación plena de
la democracia en el sentido de vivirla de una manera consciente, agregó el
catedrático universitario quien subrayó: “Queremos que en México ahora no se
lea la democracia, sino que se viva con una estructura política distinta”.
México vive una nueva era política
iniciada en 1997 cuando se aplicaron las reformas electorales constitucionales
de 1996 y desde que se integró una cámara de diputados y senadores plural. Hoy,
por ejemplo, el PRI esta desplazado ya no es partido mayoritario en ninguna de
las cámaras legislativas, lo cual ha hecho la vida parlamentaria más diversa y
polémica.
En México, insistió Venegas Trejo, siempre
hemos tenido vocación por la democracia. “De una manera o de otra –señaló-
hemos tenido ocho leyes fundamentales, aunque solo dos tuvieron larga vigencia”
Las primeras leyes políticas del país no
tuvieron el catálogo de libertades de derechos fundamentales porque fueron
diseminados en el mismo y porque las primeras constituciones fueron más bien
documentos de gobierno que no establecían la libertad como principio esencial
de la vida social.
“Establecer y limitar el poder es
una exigencia de la libertad e igualdad porque donde no se limita el poder se
tiende al autoritarismo, al gobierno arbitrario y a la dictadura y esto es la
negación del Estado”, indicó Francisco Venegas, quien aseguró que hoy se vive
un desfase entre la Constitución, sus preceptos y la vida de los mexicanos.
Desfase que obedece a circunstancias sociales, económicas, políticas y
culturales.
Tenemos, agregó, un subdesarrollo en
el que hemos permanecido desde que logramos la independencia. Debemos buscar un
sistema político en el que la clase mayoritaria sea la clase media. En ese
sentido, agregó, nuestra Constitución puede ser perfeccionada
En esta reforma de la ley suprema, concluyó, existe
una tendencia fundamentalmente académica encabezada por Ignacio Burgoa, quien
habla de una renovación que conserve el tronco de los preceptos de la
orientación que han caracterizado a la Constitución de l917.
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