Boletín UNAM-DGCS-1006
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REFORMAS A LA CONSTITUCIÓN, COHERENTES CON LAS DEMANDAS DEMOCRÁTICAS
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La Carta Magna se ha modificado básicamente
por factores de poder, afirmó Luis Molina Piñeiro, catedrático de la Facultad
de Derecho de la UNAM
Las reformas de la Carta Magna se han efectuado básicamente por factores de poder, señaló Luis Molina Piñeiro, director del Seminario de derecho y teoría política de la Facultad de Derecho (FD) de la UNAM.
Al dictar una conferencia en el posgrado
de la FD, Molina Piñeiro afirmó que el poder presidencial ha considerado que
los cambios a la Carta Magna lo hacen más popular; sin embargo, quienes quieran
hacer una reforma constitucional coherente con las demandas de la democracia
liberal, tienen que poner a discusión la propiedad de la nación como los
recursos de hidrocarburos, porque son los elementos para el desarrollo del
país.
Las reformas a las constituciones mexicanas han sido decisiones de “elites ralas”, que no pertenecen a la modernidad de la sociedad; por eso, dijo, “la intromisión permanente en la Constitución de una serie de disposiciones que aunque no tengan que ver nada con la realidad del país, sí son aspectos que se encuentran en la discusión moderna de carácter jurídico, político y constitucional”.
Nuestra Carta Magna suma los intereses de todas las clases y grupos sociales, pero excluye los intereses de la clase proletaria y, mientras no se incluyan los derechos de los proletarios, la Constitución será una simple hoja de papel, precisó Luis Molina.
Aseguró que la sociedad cambia y si se quiere que la Constitución sea eficaz “tenemos necesariamente que reformarla e integrarle estos factores reales de poder que son producto del cambio que ha tenido la sociedad”.
Una de las características de los países subdesarrollados es precisamente que no existe una sociedad, hay comunidades diversas que no tienen nada que ver con esta concepción de sociedad civil, ligadas con estos procesos de racionalización e ilustración.
“Por eso vemos que en México estos artículos constitucionales que tienen que ver con estas clases que no existen se tardan mucho en elaborar leyes reglamentarias, precisamente porque se quedan ahí en la Constitución y nunca existen leyes reglamentarias porque precisamente no hay ninguna clase que tenga interés en promover esas leyes reglamentarias”, concluyó.
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