9:00 hrs. Diciembre 24 de 2000
Boletín
UNAM-DGCS-865
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Tampoco aparecieron en nuestro
país debido al desmantelamiento del Estado benefactor de los últimos años
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Lo anterior se comprobó en la
encuesta realizada en 1997 por Fernando de Jesús Pliego Carrasco, del Instituto
de Investigaciones Sociales de la UNAM
Es falso que las organizaciones no
gubernamentales (ONG´s) que hay en la ciudad de México surgieron a partir de
los sismos de 1985. En realidad, el origen de más de la mitad de ellas es
anterior a dichos sucesos, señaló Fernando de Jesús Pliego Carrasco, del Instituto de
Investigaciones Sociales (IIS) de la UNAM.
Actualmente, dijo, en el
Distrito Federal existen más de 900 ONG’s, algunas de las cuales, incluso, son
centenarias. Muchas fueron determinantes en diversos periodos de la historia de
México, lo que cambió últimamente es que cuentan con mayor espacio y más
facilidades jurídicas para desarrollar sus actividades.
Lo anterior se desprende de la encuesta que
realizó Pliego Carrasco en 1997, cuyos resultados se publicarán en breve, la
cual está basada en 640 entrevistas directas a dirigentes o responsables de
esas organizaciones.
Con relación a las causas por las que las
ONG’s se forman, destacó que son varias: hay las que se remontan a siglos atrás
y, en general, vienen de una tradición religiosa; otras surgen de grupos que
sufrieron un proceso de politización y de concientización a través de distintas
tradiciones ideológico-políticas, y a partir de eso ven la necesidad de
intervenir en esos campos sociales, particularmente son grupos vinculados a la
izquierda.
Asimismo, existen organizaciones civiles que
aparecen por iniciativa de gente desplazada por los sectores gubernamentales,
otras provienen de movimientos internacionales, también están las formadas por
gente que sufrió alguna experiencia dolorosa a través de un familiar, por un
vacío gubernamental o el retraimiento de una política.
Un grupo muy pequeño de las ONG’s, indicó,
“encubre actividades comerciales bajo fines filantrópicos, es decir, las ven
como un negocio; evaden impuestos a través de una actividad altruista”, pero
sólo representan menos del tres por ciento del total.
Las actividades de estas organizaciones
obedecen a su particular visión social e histórica de los problemas y sus
formas de resolverlos, independientemente de que el Estado intervenga y de los
fenómenos culturales, ideológicos, políticos y religiosos, señaló el
especialista quien trabaja sobre el tema desde hace 25 años.
Tampoco es cierto que la aparición de las
ONG’s se debe al desmantelamiento que se dio en los últimos años en el México
del Estado benefactor. Lo novedoso en los últimos tres lustros es el manejo que
hacen de la idea de cogestión en políticas públicas. Varias plantean la
necesidad de que éstas se hagan de manera conjunta con organizaciones sociales,
que no sean monopolio del gobierno.
Así, “un sector importante de estas
organizaciones percibe la consolidación de un régimen democrático y como una
condición fundamental para el desarrollo de sus actividades y la expansión de
sus programas”.
Otro mito que se derrumba con la encuesta es
que todas las ONG’s tienen gran preocupación por influir en la política
pública. Lo cierto es que las
actividades que desempeñan también se relacionan con la asistencia y la defensa
de los derechos humanos.
Este tipo de agrupaciones, agregó,
trabajan en una gran variedad de actividades: salud, educación, ecología,
defensa de los derechos humanos, utilización del tiempo libre, patrimonio
cultural y familia, entre otras, además se dividen en cuatro estilos, de acuerdo
con la intervención que ejecutan para atender cada situación, lo cual no
implica que una o unas eliminen a las demás.
El primero y más tradicional es la
asistencia, esto es, dan servicio a la gente que padece una carencia
particular; el segundo, es el de promoción, buscan capacitar y apoyar para que
la población se organice y resuelva sus
problemas o los gestione.
La tercera pauta de actuación se centra en la
defensa de los derechos humanos y cívicos. De esta forma, las ONG´s buscan
influir en las políticas públicas, generar denuncias a través de los medios de
comunicación o crear corrientes de opinión a favor de determinadas actividades
o la solución de diferentes problemas.
El cuarto tipo de acción que ejecutan estos grupos
se relaciona con investigación. Hacen análisis y estudios sobre los fenómenos
específicos que abordan.
Su fuerza la proporciona el número de
personal que tienen, la cantidad de dinero que manejan y los servicios que
ofrecen. En este punto, aseguró Pliego Carrasco, existe disparidad enorme: hay
unas muy grandes, como Cáritas Arquidiócesis de México, vinculada a la Iglesia
católica, y algunas muy pequeñas, informales, que, incluso, surgen y
desaparecen pronto.
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