15:00 hrs. Diciembre 8 de 2000
Boletín
UNAM-DGCS-830
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El reconocimiento, por su trayectoria en la defensa de la justicia y los
derechos humanos
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El compromiso de la sociedad civil, necesario para que no se reiteren
episodios de violencia como los genocidios, aseguró el magistrado español
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Un sistema jurídico sólo es sustentable si se encamina a mantener
vigentes los valores fundamentales, afirmó Fernando Serrano Migallón
La Facultad de
Derecho (FD) de la Universidad Nacional otorgó la medalla “Isidro Fabela” al
Magistrado Juez de la Audiencia Nacional Española, Fernando Baltasar Garzón
Real, por su trayectoria en la defensa de la justicia y los derechos humanos.
Luego de recibir la
presea aurea de manos del director de la dependencia universitaria, Fernando
Serrano Migallón, Baltasar Garzón afirmó que si la autoridad Judicial actúa
como poder legítimo, independiente y sometido al principio de legalidad, se
tornará un elemento esencial sobre el cual se basará el sistema democrático y
contribuirá al fortalecimiento de las instituciones.
En la ceremonia
realizada en el Palacio de Minería, el magistrado español aseguró que la
independencia del juez se garantiza, en el ámbito externo, por una rigurosa
normatividad que le imponga el sólo sometimiento a la ley.
Garzón Real
manifestó que vivimos los últimos momentos del siglo que dio la luz a la
Declaración Universal de los Derechos Humanos, pero que también vivió episodios
“de sombras y violencias” como el holocausto, el genocidio tibetano y las
violaciones masivas de los derechos fundamentales en Latinoamérica.
Esta realidad
negativa, indicó el jurista galardonado, no sólo se ha producido por la desidia
o el interés político o económico, sino por la cobardía de la mayoría de los
ciudadanos.
Frecuentemente se
recurre a la omisión y al perdón, pero la historia de los pueblos dice que el
olvido de los pueblos y la manipulación del perdón actualiza el riesgo de que
el pasado se repita, indicó.
Sin embargo,
agregó, y contrario a lo que antes sucedía, hoy es más difícil ocultar estos
episodios y el compromiso de la sociedad civil ha encabezado una revolución
pacífica, que ha dado lugar a una nueva dimensión, en la cual el concepto de
soberanía pierde su sentido cuando se usa para impedir la persecución de los
delitos.
En su oportunidad,
el director de la FD, Fernando Serrano Migallón, señaló que esa Facultad de la
UNAM otorga por primera vez este galardón, en esta ocasión al jurista español
por su defensa de la libertad, la justicia y la vida, no como valores o
conceptos abstractos, sino como un axiomas que hacen posible la dignidad
humana.
Se trata, resaltó,
de un ciudadano español que representa la renovación de su país después de 40
años de angustia y terror. “Este es el resurgimiento de la esperanza y la
democracia que, como un logro de ese pueblo, constituye para todas las demás
nacionales un mensaje de fortaleza y confianza en el futuro”.
En la Universidad Nacional, manifestó
Serrano Migallón, nos enorgullecemos legítimamente de haber honrado nuestra
vocación de abrigar a todos aquellos que
se vieron privados de sus derechos fundamentales, de decir lo que se
piensa y en muchas ocasiones tuvieron que huir de su patria por persecuciones
políticas.
Nuestra institución
ha labrado el rostro del México contemporáneo en el concierto de los más variados
acentos ideológicos y los más distantes extremos doctrinales.
El funcionario
universitario coincidió con Garzón en la convicción de que un sistema jurídico
sólo es sustentable si se encamina a mantener vigentes los valores
fundamentales.
Explicó que también se le entrega
la presea porque “con decisión y valor dio el cambio que distingue al juez
humanista del primitivo ejecutor de una vaga norma coercitiva”.
La medalla “Isidro
Fabela” fue establecida por el Consejo Técnico de la Facultad de Derecho de la
UNAM para reconocer a quienes han hecho de la lucha por la libertad y la
justicia una norma de su vida, precisó.
En la ceremonia
estuvieron presentes José Narro Robles, coordinador para la Reforma
Universitaria; José Ignacio Carvajal, embajador de España en México, y los
maestros eméritos de la FD Aurora Arnaiz, Fernando Flores García e Ignacio
Burgoa.
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