9:00 hrs. Diciembre 4 de 2000


Boletín UNAM-DGCS-815

 

REQUIERE CHIAPAS MÁS RECURSOS PARA EL CAMPO Y PROGRAMAS DE INFRAESTRUCTURA

 

·        Esta es la propuesta de Otto Schumann, coordinador del Proyecto de Investigaciones Multidisciplinarias de Mesoamérica y el Sureste de la UNAM

·        El investigador universitario espera que los nuevos gobiernos, federal y estatal, adopten acciones efectivas de combate a la pobreza

 

Sin solucionar los problemas de fondo en Chiapas, como el grave desempleo, la falta de atención al campo y la insuficiente asistencia médica, no se podrá resolver el conflicto armado, aseguró el investigador Otto Schumann Gálvez, quien recalcó que no basta con denunciar o mostrar buena voluntad gubernamental, sino concretar acciones de justicia.

 

El coordinador del Proyecto de Investigaciones Multidisciplinarias de Mesoamérica y el Sureste de la UNAM expresó su optimismo en que los nuevos gobiernos federal y estatal adopten medidas reales para resolver el conflicto armado y la situación de miseria que se vive en la entidad del sureste.


 

Se debe recurrir a todos los medios, resaltó, para que no se repitan los enfrentamientos entre grupos armados y masacres como la de Acteal y otras peores ocurridas con anterioridad y que fueron poco conocidas por la sociedad, como la de Bolonchan, en el municipio de Chilón; la del Carrizal, en Ocosingo;  la de Los Encuentros, en Tila; y la de Betel, en Palenque.

 

En entrevista, el investigador universitario comentó que el pueblo chiapaneco tiene esperanza en que el nuevo gobernador Pablo Salazar Mendiguchia rompa con los esquemas establecidos y ponga en práctica otros mecanismos para resolver los problemas de la entidad, aunque reconoció que los resultados no se notarán en el corto plazo.

 

Destacó que los problemas en Chiapas no son sólo armados, sino de falta de respeto al desarrollo regional y de discriminación a los sectores más desprotegidos: los mestizos, quienes representan el 70 por ciento de la población, y los indígenas, que son el 30 por ciento restante.

 

Con respecto a éstos, señaló, a pesar de la desigualdad y mínima atención de que fueron objeto -situaciones que provocaron el conflicto armado- las medidas gubernamentales puestas en marcha desde 1994 han resultado, hasta ahora, insuficientes.

 

El maestro en lingüística subrayó que la peor discriminación es la que viven los mestizos, porque al estar dispersos en todo el estado no tienen presencia grupal y son tratados con indiferencia.

 

Dejó en claro que no es con el aislamiento de los indígenas como se resolverán los problemas de la entidad del sureste, se requieren, además, educación, bienestar social y romper con los prejuicios existentes contra estos sectores, patentizados desde el simple hecho de hablar una lengua y no el idioma español.

 

Otto Schumann indicó que, en el caso de la población que reside en la zona selvática, la estrategia de los grupos de poder es dispersarla a nuevos ejidos en las entidades más cercanas como Campeche, para apoderarse de las áreas que hoy ocupan.

 

Ante este panorama, el investigador consideró necesario desaparecer el monocultivo del café para que la sobrevivencia de los campesinos e indígenas no dependa sólo del cultivo de ese producto. Se requiere, agregó, la producción de una mayor variedad de granos.

 

El especialista en asuntos indígenas sugirió que el gobierno debe dar prioridad al campo chiapaneco, principal sustento de la población y se deben generar más empleos, de lo contrario se agudizará la pobreza extrema y la migración.

 

Asimismo, insistió en la necesidad de que se destinen mayores recursos para la creación de infraestructura de servicios porque, a pesar de los programas aplicados, la situación del estado sigue siendo lamentable.

 

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