Boletin: UNAM-2000/695 Lugar: Ciudad Universitaria
Fecha: Lunes, 23 de Octubre de 2000
EVITAR LA CONFRONTACIÓN POR CAUSA DE LA DIVERSIDAD, RETO DE LA DEMOCRACIA

· Ese régimen es el actual esquema institucional hegemónico, señaló Judit Bokser Misses, de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales



· De 1970 a la fecha se ha multiplicado el número de países que la han asumido como propia
Frente a la heterogeneidad que hay en el mundo en cuanto a razas, credos e ideologías, la propuesta que se plantea en la actualidad es ver si la
democracia puede influir para que esa diversidad no se exprese en una confrontación de consecuencias dolorosas y sea canalizada dentro de un
ordenamiento cívico, afirmó Judit Bokser, jefa de la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPS) de la
UNAM.


Al dictar la conferencia Reflexiones sobre la democracia, moderada por James Lambert, ministro consejero de la Embajada de Canadá en México,
explicó que para que exista la democracia se deben garantizar ciertos principios de libertad, mismos que deben regir la convivencia humana.


En el marco del VII Congreso Anual de la Asociación Mexicana de Estudios Canadienses, Judit Bokser señaló que la democracia es el régimen
político dominante en la organización de la convivencia humana. “Los procesos de globalización y la interacción social transfronteriza que de éstos
se derivan la han convertido en el esquema institucional hegemónico”.


Añadió que la creciente fuerza expansiva de este régimen se ubica en la propuesta que hace para legitimar el ejercicio de la autoridad política con
base en la periódica y libre elección de sus ciudadanos


Ante este panorama -resaltó- democracia y ciudadanía emergen como dos caras de la misma moneda que experimentan una nueva visibilidad, y un
renacimiento teórico y práctico.


Respecto a las características de las democracias, la profesora de la FCPS consideró, retomando los conceptos de Diamond, que el control del
Estado y sus decisiones claves descansa en sus funcionarios electos.


Asimismo, el poder ejecutivo está constreñido, de acuerdo con la Constitución, por el poder autónomo de otras instituciones gubernamentales; los
resultados electorales no están predefinidos, pues hay oposición y alternancia del poder, y a todo grupo que se adhiere a las leyes no se le niega el
derecho de formar un partido y competir en las elecciones.


Destacó que a las minorías culturales, étnicas, religiosas u otras no se les prohibe expresar su interés en el proceso político, hablar su lengua o
practicar su cultura.


Más allá de las elecciones y los partidos, los ciudadanos tienen múltiples canales de expresión y representación de sus intereses en donde se
incluyen las asociaciones independientes, las cuales tienen la libertad de organizar.


Bokser comentó que los individuos tienen libertad de creencias, opiniones, discusión, publicación, demostración y demandas, y la distinción entre
libertades políticas y cívicas, por una parte, y culturales por otra, a veces se diluye o confunde.


Apuntó que desde la caída del régimen portugués de Salazar, en abril de 1974, el número de democracias en el mundo se ha multiplicado de manera
impresionante. Hasta entonces había cerca de 40 y en la actualidad, de acuerdo con Larry Diamond en su libro Developing Democracy, hay 76 ó
117, “dependiendo de los criterios con los que se evalúa” esta condición, señaló Bokser.


Esta tendencia, aclaró la especialista, inició en el sur de Europa a mediados de los años 70 y más tarde se extendió a los regímenes militares
sudamericanos, así como al este y sur de Asia. En ese tiempo también se dio la transición de los gobiernos comunistas en Europa oriental, la URSS,
Centroamérica y por último en África.

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