Boletin:

UNAM-2000/626

Lugar:

Ciudad Universitaria

Fecha:

Miércoles, 04 de Octubre de 2000

NECESARIO QUE EL GOBIERNO FEDERAL ENTIENDA QUE LAS FINANZAS QUE MANEJA SON PÚBLICAS, NO PRIVADAS

· Urge mayor financiamiento a las instituciones de educación superior, aseguró el director de la Facultad de Economía, Guillermo Ramírez

· Agregó que de no tomarse en cuenta lo anterior podrían desencadenarse problemas en las universidades públicas

En el momento en que el gobierno federal comprenda que maneja finanzas públicas y no privadas, las instituciones de educación superior no tendrán

problemas presupuestales y, por ende, la Universidad Nacional tampoco, afirmó Guillermo Ramírez, director de la Facultad de Economía (FE).

Durante la videoconferencia de prensa realizada hoy por la FE, que se llevó a cabo desde esta dependencia hacia la Unidad de Seminarios Ignacio

Chávez, el funcionario destacó que las finanzas públicas consideran, en primer lugar, las necesidades y a partir de ahí se destinan los recursos. En

el caso de las privadas es al revés.

El asunto, dijo, es que el presidente electo, Vicente Fox, por su trayectoria intentará aplicar modelos de gestión administrativa privada, lo que puede

transformarse en problemas dentro de las universidades públicas.

Dichas instituciones, aseveró, no son cadenas de fast food, aunque existen algunas que se han expandido rápidamente como ese tipo de negocios,

“pero ¿qué valores son los que se enseñan?, ¿éstos corresponden a los que la nación necesita?”, se preguntó Guillermo Ramírez.

Sobre el tema de presupuesto de la UNAM hablaron los profesores consejeros técnicos de la FE Manuel Coello Castillo, Consuelo González

Rodríguez y Clemente Ruiz Durán. El primero señaló que los recursos asignados actualmente a la institución resuelven mínimamente su problema de

sobrevivencia, porque el 80 por ciento se va a sueldos y salarios, “y la idea no es esa, sino que tenga proyección”.

Agregó que un Estado que no destina los recursos necesarios a la educación superior no podrá competir con otros países, por ello, no es posible

pedir mayor calidad educativa si no se cuenta con el apoyo financiero adecuado.

Al respecto indicó que se tiene que abrir la discusión a nivel nacional sobre la educación pública y, especialmente, acerca del proyecto de

Universidad Nacional que queremos y su forma de gobierno.

Consideró necesario tener claro el proyecto de educación superior que se desea y la importancia que se le va a dar para asegurar que más del 80

por ciento de los jóvenes accedan a ese nivel educativo, lo cual garantizaría el futuro del país.

Si nos preguntamos sobre la prioridad de la educación superior para México y nos respondemos que sí la tiene, “entonces tenemos que ver de

dónde obtener los recursos adecuados para ello”, los cuales “no hemos tenido desde hace una década”.

Si hemos tenido la capacidad de rescatar la banca debemos rescatar a la universidad pública. De otra forma, nos convertiremos en un país

maquilador, concluyó.

A su vez, Ruiz Durán manifestó que no se pueden aceptar pequeños incrementos en el presupuesto para la educación superior. México, aseveró,

debe adaptarse a las condiciones del mundo e invertir mucho más en educación, cosa que no ha hecho.

Sostuvo también que para asignar más recursos a la enseñanza no es necesario quitárselos a otros rubros, sino realizar ajustes fiscales, para

destinar cuando menos dos puntos porcentuales más del Producto Interno Bruto.

“Tenemos que garantizar que cualquier persona que haga el esfuerzo, pase los exámenes y cumpla con los requisitos establecidos, pueda entrar a

la Universidad”.

En torno a la posibilidad real de que se incremente el presupuesto a para la educación superior, el economista destacó la señal positiva que dio a

conocer el equipo de transición del presidente electo, Vicente Fox, el cual aseguró que se va a apoyar más la formación de recursos humanos.

Finalmente, Consuelo González Rodríguez resaltó que para reorganizar el presupuesto destinado a la UNAM hay que tomar en cuenta a todos los

sectores involucrados. De este modo, se podrán enfrentar los diferentes proyectos y necesidades que tiene la institución, tanto en su ámbito

académico como para la investigación.

Lo anterior, sostuvo, ayudará a avanzar en el Congreso Universitario y, desde ahí, pensar en formas novedosas de lograr un mayor presupuesto

para la máxima casa de estudios. "Hay ideas que están ahí pero que todavía no han cuajado. Para ello necesitamos una gran voluntad para realizar

los grandes cambios que necesita la Universidad Nacional".

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