Boletin:          UNAM-2000/560

Lugar: Ciudad Universitaria

Fecha: Miércoles, 13 de Septiembre de 2000

 

MÉXICO CUENTA YA CON UN SISTEMA ELECTORAL Y DE PARTIDOS COMPETITIVO

 

 

La transición, desde el punto de vista del desmantelamiento del sistema de partido de Estado, ya concluyó; lo que hoy tenemos ante nosotros es la existencia de un sistema electoral y de partidos competitivo, afirmó Pablo Javier Becerra, investigador de la UAM Iztapalapa, durante su participación en la mesa redonda El mapa electoral del país.

 

En el marco del Seminario Interinstitucional El 2 de julio: reflexiones posteriores, que se efectúa en el Instituto de Investigaciones Sociales, el académico sostuvo que el viejo sistema de partido hegemónico ya no existe. Lo que hoy tenemos es uno plenamente competitivo de partidos con distintos formatos y características regionales de competencia.

 

No hubo mano negra que revirtiera resultados, precisó, sino un control bastante aceptable sobre variables que antes eran determinantes como coacción y compra del voto o el manejo de los gobernadores de la elección dentro de sus estados.

 

Destacó que el proceso electoral mexicano del 2000 constituyó una pieza definitoria para la transición a la democracia. "Sin embargo, desde 1997, en las elecciones de diputados, ya se podía percibir que la clave de los triunfos del PRI era la división entre los partidos de oposición, cuyos votos sumados representaban más del 50 por ciento del total".

 

Entonces, señaló, se planteaba que esta transición pasaría por dos vías: la competencia entre partidos y su papel como actores fundamentales en los procesos electorales, y la participación activa de los electores quienes vieron la posibilidad de razonar su voto y hacerlo útil.

 

Por su parte, María Eugenia Valdés, investigadora de la UAM Iztapalapa, aseveró que el comportamiento electoral del 2000 muy difícilmente se va a volver a repetir en nuestro país.

 

"Aparentemente fue bueno y aunque el PRD perdió mucho terreno, no debemos perderlo de vista porque es todavía un partido fuerte y, en este sentido, es muy importante para México seguir contando con una auténtica fuerza política de izquierda", indicó.

 

La especialista en geografía electoral, puntualizó que al hacer un análisis de comportamiento de votantes en las elecciones del 2000, desde el punto de vista del grado de marginalidad, llama la atención que el PAN ganó votos en una entidad como Chiapas, mientras el PRD perdió sufragios en muchos municipios de esa misma entidad, y "pasó de 30 a menos de 10 por ciento".

 

Asimismo, explicó, otro fenómeno que se presentó en los pasados comicios fue que el PRI y el PRD ganaron votos en poblaciones menos marginadas como Durango y Zacatecas. "Si se comparan las estadísticas de las elecciones del 97 y las de este año, se puede afirmar que 1997 fue el año del PRD, pero en el 2000 cayó notoriamente su influencia entre los electores".

 

Finalmente, Silvia Gómez Tagle, investigadora de El Colegio de México, enfatizó la importancia de que en las elecciones del 2000 los sufragantes contaran con un mínimo de garantías para el ejercicio del voto.

 

Reconoció que gracias a las reformas electorales en México, ahora se cuenta con un Instituto Federal Electoral autónomo, capaz de proporcionar datos confiables y fidedignos.

 

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