Boletin:          UNAM-2000/517

Lugar: Ciudad Universitaria

Fecha: Jueves, 31 de Agosto de 2000

 

TALENTOS MEXICANOS REGRESAN AL PAÍS A APLICAR SUS CONOCIMIENTOS Y A PREPARAR NUEVOS PROFESIONALES

 

 

Los investigadores mexicanos que regresan al país luego de formarse en el extranjero se incorporan a las instituciones de educación superior con la intención de corresponder con la preparación que recibieron y contribuir en la formación de nuevos profesionales, aseguraron académicas de la UNAM.

 

Luego de que la directora del Instituto de Investigaciones Económicas (IIEc), Alicia Girón, anunció en conferencia de prensa que los días 5 y 6 de septiembre se llevará a cabo el seminario "Tecnología, desarrollo y universidad: México 2000", Alma Herrera, académica de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Zaragoza señaló que las instituciones mexicanas no están preparadas para incorporar a todos los talentos formados en el extranjero.

 

En el seminario, agregó, se propondrán estrategias para incorporar a estos talentos en mejores condiciones a las distintas instituciones y universidades, a fin de aprovecharlos en beneficio del país, a través de un proyecto que podría fortalecerse en los próximos años.

 

La investigadora de la FES Zaragoza indicó que además es bajo el número de tecnólogos y científicos existentes. De 1981 a 1995, México tenía 93 especialistas por cada millón de habitantes, mientras Japón, cinco mil 700; Alemania más de tres mil; Francia dos mil 500, y Costa Rica 363. Tan sólo el Sistema Nacional de Investigadores (SNI) tiene entre siete mil y ocho mil en todo el país.

 

En la conferencia de prensa, Judith Licea, profesora de la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL), se refirió a la migración de los talentos. Dijo que la formación de doctores en el extranjero tiene un costo anual de 50 mil dólares y su preparación, en promedio, puede durar de tres a cinco años.

 

El problema, comentó, es que no todos los investigadores mexicanos formados en el extranjero regresan al país. Agregó que en el caso de los que estudian en Estados Unidos, sólo el 20 por ciento se incorporan a las instituciones nacionales.

 

Así, del área de medicina, uno de cada ocho graduados regresa como investigador, mientras que de matemáticas es uno de cada tres.

 

Judith Licea especificó que las causas principales por las que los especialistas no regresan a México a incorporarse al Sistema Nacional de Investigadores son la falta de motivación, de vocación y de infraestructura.

 

A su vez, la directora ejecutiva de Asesores Internacionales en Prospectiva, Georgina Sánchez, sostuvo que la cohesión social en México pasa por transformaciones de fondo que marcarán el futuro del país en los próximos 30 años, al articularse un movimiento hacia la diferenciación de posiciones, la individualización de la población y la consolidación de la sociedad civil.

 

Al hablar sobre la conferencia magistral que impartirá en el seminario, "Futuros sociales de México: cohesión social, ciencia y tecnología", puntualizó que en el proceso de cambio, el abandono acelerado de la concepción tradicional de unidad nacional podría tener consecuencias sobre la estabilidad económica, la certidumbre política y la paz social.

 

La ciencia y la tecnología, aseveró la especialista, no han sido un pivote del desarrollo en México, porque éste no sólo significa máquinas sino procesos e ideas innovadoras.

 

Abundó que México ha preferido optar por políticas que dan poco margen a la inversión en ciencia y tecnología, y a pesar de las fuertes sumas dedicadas a la educación, financiamiento en la formación de capital humano. Ello, añadió, traerá consecuencias sobre la cohesión social y los futuros sociales de México, por lo que la inversión en ciencia y tecnología del futuro tendrá que pensarse de manera diferente, empezando por enseñar cómo preparar el futuro.

 

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