Boletin: UNAM-2000/483 Lugar: Ciudad Universitaria
Fecha: Martes, 22 de Agosto de 2000
BOMBEROS UNIVERSITARIOS CELEBRAN SU DÍA

· Cuentan con equipo suficiente y adecuado para realizar sus tareas



· Atienden semanalmente, en promedio, entre ocho y 10 siniestros de diversa índole; inundaciones en vialidades y fugas de gas las más frecuentes.
Tragedias como las recientes inundaciones en Chalco o el incendio de la planta de Petróleos Mexicanos, ubicada en San Juan Ixhuatepec, ocurrida
hace algunos años, han contado con el decidido apoyo del Departamento de Prevención y Combate de Siniestros (DPCS) de la UNAM, que hoy
celebró el Día Nacional del Bombero.

En el desayuno conmemorativo, el doctor Daniel Barrera Pérez, secretario administrativo de la UNAM, dijo a los integrantes de este cuerpo de
rescate que son parte de “uno de los orgullos de la Universidad Nacional”. Gracias a ustedes, añadió, muchas vidas y nuestro patrimonio han sido
salvados.

El funcionario universitario informó también que se buscará la manera de proporcionar mayores recursos a esa área, a fin de mejorar sus
condiciones de trabajo.

A su vez, el licenciado Ignacio Medina Bellmunt, director general de Servicios Generales, de quien depende la DPCS, indicó que el cuerpo de
bomberos de la máxima casa de estudios está constituido por 70 elementos, que se distribuyen en cuatro guardias, las cuales cubren las 24 horas
de todos los días del año.

Tres de las guardias, precisó, están dedicadas a la atención de emergencias y una más realiza labores preventivas, las cuales han dado como
resultado que dentro del campus de CU sean mínimas las emergencias en los últimos meses. Las emergencias más recurrentes son las
inundaciones en vialidades y las fugas de gas.

Informó, asimismo, que los bomberos universitarios (quienes tienen un alto sentido de honestidad y responsabilidad, y en tan sólo 35 segundos están
listos para atender una emergencia), están capacitados para atender conatos de incendios en zonas urbanas o forestales, inundaciones, retiro de
árboles caídos, fugas de gas, derrame de sustancias peligrosas, accidentes automovilísticos, rescate de personas atrapadas, detección y
desactivación de artefactos explosivos, cortos circuitos, combate a fauna nociva, retiro de enjambres de abeja africana, entre otros.

Continuamente reciben actualización para desarrollar, de manera eficiente, su trabajo a través de cursos, seminarios y talleres. Tampoco se olviden
de la preparación física que deben tener para responder de forma inmediata a las emergencias y, para ello, realizan rutinas de ejercicios y disponen
de un gimnasio que complementa su adiestramiento.

Medina Bellmunt resaltó además que la labor del DPCS no se circunscribe solamente al campus de CU; algunas veces colabora con los cuerpos de
emergencia y de protección civil del Distrito Federal, en particular de las delegaciones Coyoacán y Tlalpan, y del Estado de México, pues forma parte
de los comités interinstitucionales de riesgos Hidrometereológicos y el de Incendios Forestales en Epoca de Estiaje.

Para enfrentar las emergencias cuenta con cinco motobombas, una escala telescópica para 14 niveles, tres autotanques, tres unidades de atención,
equipo de aproximación e introducción al fuego, herramientas especiales para la liberación, rescate y remoción de escombros, y con sistemas de
cuerdas para rescate de víctimas.

A nombre de los bomberos universitarios, Gerardo Juárez Alvarez destacó que tres conceptos son los que norman la conducta de esta
corporación: honor, lealtad y abnegación. “El bombero podrá morirse pero jamás cansarse”. Y este día, agregó, renovamos los votos y el
compromiso fundamental que debemos cumplir.

En entrevista, el mayor Leopoldo Colchado Díaz, jefe del DPCS, puntualizó que mientras haya accidentes, el trabajo de los bomberos no puede
concluir y siempre deberá ver la forma de ayudar.

Resaltó que la DPCS atiende, en promedio, entre ocho y 10 siniestros a la semana, dependiendo de la temporada. En época de calor, dijo, aumentan
los incendios forestales, y en la de lluvias los accidentes de tránsito.

Explicó que aunque es un equipo integrado para atender las emergencias de la Universidad, su labor de apoyo a la sociedad en general nunca se
interrumpe, ya que se atienden y se colabora en situaciones registradas fuera de las instalaciones universitarias.

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