Boletin: UNAM-2000/459
Lugar: Ciudad
Universitaria
Fecha: Viernes, 11 de
Agosto de 2000
LA CARNE DE AVESTRUZ, ALTERNATIVA ALIMENTICIA PARA EL PAÍS
Frente al constante
crecimiento poblacional, el consumo de la carne de avestruz, así como el
aprovechamiento de su plumaje, grasa, huevos y todas las partes del ave más grande del mundo,
es una de las alternativas de mayor futuro en el sector alimentario en nuestro
país.
De acuerdo con el médico veterinario zootecnista, Miguel
Angel Olarte Díaz, del Taller de Cárnicos de la Facultad de Estudios Superiores
Cuautitlán, el proyecto del avestruz, "que ya es toda una realidad"
puede ser una alternativa importante "si nos ponemos a trabajar" de
manera decidida.
"Que el consumo de la carne de esta ave se convierta
en algo común en el corto o mediano plazo dependerá de una buena campaña de comercialización.
Si se invierten los recursos necesarios como para trabajar de manera decidida,
no sólo en aspectos de organización sino también en buenos esquemas de
comercialización y en la realización de un manual de cortes, se podría generar
un cambio inmediato", aseveró.
Según datos de la Secretaría del Medio Ambiente Recursos
Naturales y Pesca, en la actualidad hay unos 700 criaderos de avestruz en toda
la República Mexicana, sin contabilizar las pequeñas granjas.
La avestruz, originaria de Africa, tiene una impresionante
adaptabilidad a las diferentes geografías del territorio nacional, desde el
trópico hasta lugares extremosos en el norte, el Valle de México, Veracruz,
Chiapas y Michoacán.
Sin embargo, Miguel Angel Olarte, advirtió que no "nos
debemos dejar llevar por la idea de que la carne de avestruz es baja en
colesterol y magra, porque algunos factores que influyen en ello se pueden
modificar por medio de la alimentación, la edad y saber qué tipo de animal se
sacrificará".
Explicó que una de las principales ventajas de esta ave
corredora es su rendimiento, ya que de una sola hembra se puede obtener, en
términos medios, sesenta animales al año. De estos no todos se desarrollan de
manera satisfactoria, se logran aproximadamente 40 animales listos para el consumo,
con peso promedio de 100 a 110 kilogramos.
Además, este producto no es de elite. Se puede llevar a
zonas de bajos recursos. Su alimentación no es costosa, debido a que su
capacidad de adaptación a cualquier clima le permite comer lo que sea. Lo más
costoso son los suplementos alimenticios.
En comparación -añadió- el kilo de res cuesta entre 40 y 60
pesos, aunque otro tipo de corte más fino como el filete cuesta unos 100 pesos,
en tanto que el kilo de carne de avestruz, que ya se comercializa, oscila entre
60 y 70 pesos. El precio se ha abaratado desde 1992, cuando costaba 300 o 400
pesos.
El integrante del Taller de Carnes de la FES Cuautitlán
opinó que no es seguro que la crianza y comercialización del avestruz sea un
garbanzo de a libra, "sabemos –añadió- que quienes trabajan en el sector
agropecuario arriesgan su porvenir, porque de repente hay aranceles muy altos o
muy bajos, como sucede hoy con el cerdo, cuyos productores obtienen buenos
precios, pero de un momento a otro ingresa al país carne de Estados Unidos y
Centroamérica y su costo baja ".
Recordó que el proyecto nació en la FES en 1992, cuando el
Taller comenzó a dar asesorías sobre métodos de sacrificio, tipos de cortes y
prácticas adecuadas de higiene en el manejo de la carne, así como en la
producción de manuales.
Esto ha permitido trabajar con la avestruz en varias
entidades, con el desarrollo proyectos no sólo de cortes, sino también de
incubación, o de subproductos como las plumas, la piel y el huevo.
"Trabajamos en la utilización del excremento de la
avestruz para hacer fertilizantes, incluso en algunos supermercados ya está a
la venta la avestruzasa, un fertilizante para plantas sin olores. Este mismo
producto, pero mediante otro proceso, se trasladó a los cafetales”, comentó.
Lo que buscamos -señaló Olarte Díaz- es que toda la ave sea
utilizable. En algunos momentos, incluso, se ha mencionado que las córneas y el
tendón podrían servir para trasplantes humanos.
Se trata -comentó- de que todos estos proyectos no se
queden olvidados como ha sucedido con otros. Por fortuna, en estados como
Chiapas, Oaxaca, Michoacán y Veracruz se han formado asociaciones que lleva a
cabo todo un esquema de comercialización. Se les capacitó para sacrificarlas de
acuerdo con la normatividad y obtener un producto de calidad.
Por último, Miguel Angel Olarte dijo que se debe continuar
el impulso del consumo de este tipo de carne porque el paladar mexicano no está
acostumbrado a consumirla, ya que su sabor es un poco fuerte. Es necesario
trabajar en la alimentación del animal para acentuar sus sabores.
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