Lugar: Ciudad
Universitaria
Fecha: Miércoles,
19 de Julio de 2000
NECESARIO FORTALECER LA INVESTIGACIÓN MULTIDISCIPLINARIA EN
LA UNAM: DRUCKER
La Universidad Nacional debe fortalecerse académicamente
para que la formación de recursos humanos sea la mejor del país, afirmó René
Drucker Colín, coordinador de la Investigación Científica de la UNAM.
Al hablar durante la undécima mesa del “Encuentro de
Especialistas en Educación Superior”, el funcionario dijo que la UNAM debe
adoptar una nueva estrategia en la investigación a través de actividades
multidisciplinarias, para ampliar su capacidad científica y alcanzar liderazgo
a nivel mundial.
Recordó que gracias a la máxima casa de estudios,
institución en la que se cultivan prácticamente todas las disciplinas, la
actividad científica en nuestro país ha alcanzado los niveles en que
actualmente se ubica.
Afirmó que la estrategia utilizada en el pasado en este
renglón fue muy útil en su momento, pues permitió crear más grupos científicos
que abarcaran nuevos campos del saber, pero actualmente necesitamos tener una
visión diferente de cara a los cambios.
En sus institutos, explicó, la UNAM cuenta con excelentes
investigadores que cultivan la gran mayoría de las disciplinas, pero sus
esfuerzos están atomizados. Ahora es necesario crear grandes grupos de
investigación multidisciplinaria, a fin de cambiar nuestra capacidad
científica.
Drucker Colín manifestó que ningún país, en especial los
subdesarrollados, puede realmente tener actividad científica en todas y cada
una de las ramas y ser líderes mundiales en ellas. Por ello, es necesario
ubicar las áreas estratégicas, aquéllas en las que se tengan los mayores
avances y procurar generar grandes grupos de académicos que están en la
frontera de la ciencia.
Esto no significa, aclaró, que se vayan a desatender otras
áreas o a dejar de apoyarlas, ni mucho menos menoscabar la libertad de
investigación; por el contrario, con las investigaciones multidisciplinarias se
facilitaría incorporar gente joven a este campo y se evitaría que los equipos
de los laboratorios estén subutilizados.
Explicó que para lograr este objetivo es necesario
modificar dramáticamente los sistemas de evaluación, que en la actualidad
califican de manera desigual a los investigadores y se basan en una cultura de
la desconfianza. Es necesario primero articular grupos grandes de
investigadores y luego calificar su trabajo, puntualizó.
El coordinador de la Investigación Científica de la
Universidad señaló, en el encuentro que se realiza en la Torre II de
Humanidades, que la institución debe fomentar el crecimiento de esta actividad
fuera de la zona metropolitana.
Las universidades públicas del interior de la República
adolecen de muchas fallas en sus sistemas, ya que no están estructuradas para
ese propósito y privilegian la investigación aplicada sobre la básica, que es
la que genera nuevos conocimientos. La UNAM puede ayudar a fortalecer a esas
instituciones en este ámbito y refrendar con ello su carácter nacional.
Drucker Colín afirmó que el Estado es el primer responsable
del desarrollo de la actividad científica del país y debe aportar los recursos
necesarios para lograr el crecimiento de las instituciones de educación
superior, pero al mismo tiempo éstas deben encontrar nuevos mecanismos de
apoyo.
La actividad científica, señaló, tiene costos muy elevados
y hay proyectos que sólo pueden llevarse adelante con aportaciones de la iniciativa
privada. Esto no implica, aseguró, que sean los empresarios quienes dictaminen
o decidan qué investigaciones tienen que realizarse.
Drucker Colín puso como ejemplo la falta de desarrollo
farmacológico en México, actividad que está totalmente en manos de los grandes
laboratorios, a los que no les interesa trabajar con medicamentos para las
enfermedades propias de la pobreza, porque los pobres no pueden pagar esos medicamentos.
En la jornada sobre “Universidad y Conocimiento”, que se
realiza en el marco del encuentro de Especialistas en Educación Superior,
participó también Enrique Buzo, de la Coordinación de Humanidades, quien expuso
que la UNAM es la institución con más amplio trabajo de investigación en
ciencias sociales.
Hay disciplinas de este campo del saber, explicó, en las
que la Universidad Nacional es la única que realiza investigaciones. Buzo
consideró que al contar sólo con el equivalente al 3 por ciento del total del
presupuesto federal destinado a ciencia y tecnología, el Subsistema de
Humanidades ha demostrado ser altamente eficiente.
Al hablar sobre la difusión de la ciencia, Julieta Fierro,
directora general de Divulgación de la Ciencia de la UNAM, aseguró que México
necesita revalorizar el papel fundamental de la ciencia y la tecnología para el
desarrollo armonioso de la sociedad.
Aclaró que si bien no se conoce la situación actual de la
divulgación en México, es indispensable contar con amplios programas en todo el
país que incluyan centros de ciencia y todo género de medios masivos de
extensión, así como el empleo de medios escritos para complementarlo.
En ese sentido, Javier Flores, profesor del posgrado de la
Facultad de Medicina, dijo que la divulgación de la ciencia es sin duda uno de
los medios para acrecentar los vínculos de la UNAM con la sociedad.
Con ello –agregó- la Universidad contribuiría a conformar
una nación mejor preparada para enfrentar los desafíos del mundo actual y, al
mismo tiempo, nuestra máxima casa de estudios contaría con una base sólida
entre la población para desarrollarse.
Es necesario también discutir los términos de una política
de difusión científica y un programa ambicioso para que en el corto plazo la
UNAM esté a la vanguardia de un proyecto de tipo nacional. “El Congreso
Universitario puede ser el escenario para lograr este propósito”, sostuvo.
Por último, Teresa Pacheco, quien habló de la organización
institucional de la investigación en la UNAM, comentó que la tarea de revisar
la viabilidad de la actual estructura de la investigación corresponde tanto a
la administración de la institución como a toda la comunidad.
“A la primera –advirtió- le corresponde abrirse tanto a las
múltiples posibilidades ofrecidas por los cambios sociales y culturales como a
los requerimientos de nuevas formas de pensar la vida institucional y la
organización de los grupos; y a la segunda la compete la reflexión colegiada acerca
de los vínculos que guarda con los procesos del conocimiento y las
posibilidades de promover cambios”, entre otras.
--0o0--