Boletin:       UNAM-2000/359    

Lugar:         Ciudad Universitaria

Fecha:         Jueves, 29 de Junio de 2000

 

INNOVADORA TECNOLOGÍA DE LA UNAM EN APOYO A LA INDUSTRIA NACIONAL

 

·       · Sus investigadores elaboraron recubrimientos contra la corrosión de metales que garantizan mayor resistencia en vidrios, entre otros

        

·       · Inventos que le permiten a la UNAM generar recursos económicos propios

 

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El Departamento de Física Aplicada y Tecnología Avanzada (FATA) del Campus Juriquilla de la UNAM, en Querétaro, ha desarrollado tecnologías innovadoras destinadas a fortalecer la industria nacional y a elevar su competitividad internacional.

 

El jefe de la división del FATA, Víctor Manuel Castaño, explicó que un grupo de especialistas de diversas áreas aplica sus conocimientos a fin de solucionar los problemas que enfrentan las industrias durante el desarrollo de sus productos, además permitirán a la institución generar recursos propios adicionales para continuar e intensificar sus investigaciones.

 

Estas innovadoras tecnologías resolverán problemas que afectan distintas ramas de las industrias, desde las que producen equipos de alto valor económico, como es el caso de las empresas automotrices, hasta las que hacen tornillos.

 

Víctor Manuel Castaño reseñó que se elaboró un recubrimiento de metales, para evitar la corrosión, problema que afecta a todas las industrias que producen estos materiales en el mundo, con lo que podrán eliminar pérdidas por 100 mil millones de dólares a nivel mundial.

 

Comentó que una importante empresa automotriz exportadora de cajas de velocidades sufría pérdidas económicas millonarias, debido a que su producto llegaba oxidado a su destino y era rechazado.

 

“La empresa nos planteó el reto de resolver esta situación. Lo aceptamos y luego de año y medio de investigación logramos crear un recubrimiento que evita la corrosión y mantiene las características requeridas por el productor ”, explicó Castaño.

 

La oxidación en los metales se da por la diferencia de oxígeno que existe dentro y fuera de éstos, de tal forma que con una nonésima que logre penetrar comienza la corrosión. “Lo que hicimos –agregó Castaño- fue igualar la cantidad de oxígeno dentro y fuera del metal, lo cual impide su oxidación”. Por el momento, el recubrimiento se aplica al acero y a la plata, pero esperamos en poco tiempo utilizarlo en todos los metales.

 

En la actualidad, el FATA tiene en proceso de comercialización el producto, con el propósito de obtener mayores recursos económicos para la Universidad y con estos fortalecer las investigaciones.

 

El titular del FATA dijo que en el caso del recubrimiento cerámico, tiene un espesor de nanómetro –equivale a 10 a la menos nueve metros o mil millonésimas partes de un metro--. El producto se deposita en algunos tipos de plástico, lo que le permite una mayor conservación porque evita que se raye. Puso como ejemplo las micas de los lentes.

 

En cuanto al recubrimiento del vidrio, el investigador comentó que por lo regular este material tiene poca resistencia al impacto. Al aplicarle el nuevo material mejora sus propiedades y disminuye la posibilidad de ruptura, especialmente a los cristales usados en los automóviles.

 

Castaño comentó que en otros países se utilizan técnicas distintas en el tratamiento del vidrio, pero la creada por la UNAM, tras una investigación de seis meses, está basada en tecnología exclusivamente mexicana.

 

Además, de estas innovaciones, el jefe de la División del FATA dio a conocer la mezcla de asfalto con hule, dos materiales repelentes entre sí, que fueron fusionados y propician mayor duración de la cinta asfáltica. Este producto también puede ser utilizado como impermeabilizante para techos, incluso en breve será comercializado.

 

Otra aportación de los investigadores universitarios del FATA es el recubrimiento dental, que impide que los dientes se manchen por fumar, beber café o refresco, el cual todavía se encuentra en la etapa de prueba y está en trámite la validación por parte de la Secretaría de Salud (SSA).

 

Todos los desarrollos tecnológicos, resaltó el especialista, tienen una inversión costosa que no se puede cuantificar económicamente, pero requiere de una importante participación de investigadores y estudiantes, así como de la utilización de toda la infraestructura de la UNAM.

 

Los desarrollos tecnológicos, informó, tienen como destino su comercialización –como ya se ha hecho en algunos casos -, por lo que se espera quela Universidad Nacional logre obtener recursos económicos de ellos.

 

El FATA, fundado en 1991 en el Instituto de Física de la UNAM, se trasladó al Campus Juriquilla como parte del proceso de descentralización promovido por la Rectoría. Ahí laboran 15 investigadores y 13 técnicos académicos de tiempo completo.

 

En esta dependencia se realiza investigación científica aplicada con un enfoque multidisciplinario. También, contribuye a la formación de recursos humanos en física aplicada, mediante el apoyo de programas académicos de la región en los niveles licenciatura y postgrado.

 

Además, establece mecanismos que permiten la colaboración fructífera con la industria, con lo que impulsa la vinculación entre el sector productivo y el académico, además lleva a cabo actividades de divulgación con el propósito de participar en forma activa en los desarrollos científico y cultural de la región.

 

En materia de productividad académica, el FATA ha publicado cerca de 300 artículos en revistas internacionales y 50 en nacionales; se han dirigido 18 tesis de doctorado, 21 de maestría y 168 de licenciatura, así como se obtuvieron patentes del país y extranjeras.

 

De los trabajos de investigación pendientes, Víctor Manuel Castaño mencionó el de fibra óptica de plástico para la telefonía y la comunicación; materiales que servirán de dosímetros, lo que significa la medición de la radiación y, el diseño y desarrollo de espejos novedosos para el enfoque de ondas de choque en litotripsia, entre otros proyectos.

 

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