Boletin: UNAM-2000/359
Lugar: Ciudad
Universitaria
INNOVADORA TECNOLOGÍA DE LA UNAM EN APOYO A LA INDUSTRIA
NACIONAL
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Sus investigadores elaboraron recubrimientos contra la corrosión de metales que
garantizan mayor resistencia en vidrios, entre otros
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Inventos que le permiten a la UNAM generar recursos económicos propios
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El Departamento de Física Aplicada y Tecnología Avanzada
(FATA) del Campus Juriquilla de la UNAM, en Querétaro, ha desarrollado
tecnologías innovadoras destinadas a fortalecer la industria nacional y a
elevar su competitividad internacional.
El jefe de la división del FATA, Víctor Manuel Castaño,
explicó que un grupo de especialistas de diversas áreas aplica sus
conocimientos a fin de solucionar los problemas que enfrentan las industrias
durante el desarrollo de sus productos, además permitirán a la institución
generar recursos propios adicionales para continuar e intensificar sus
investigaciones.
Estas innovadoras tecnologías resolverán problemas que
afectan distintas ramas de las industrias, desde las que producen equipos de
alto valor económico, como es el caso de las empresas automotrices, hasta las
que hacen tornillos.
Víctor Manuel Castaño reseñó que se elaboró un
recubrimiento de metales, para evitar la corrosión, problema que afecta a todas
las industrias que producen estos materiales en el mundo, con lo que podrán
eliminar pérdidas por 100 mil millones de dólares a nivel mundial.
Comentó que una importante empresa automotriz exportadora
de cajas de velocidades sufría pérdidas económicas millonarias, debido a que su
producto llegaba oxidado a su destino y era rechazado.
“La empresa nos planteó el reto de resolver esta situación.
Lo aceptamos y luego de año y medio de investigación logramos crear un
recubrimiento que evita la corrosión y mantiene las características requeridas
por el productor ”, explicó Castaño.
La oxidación en los metales se da por la diferencia de
oxígeno que existe dentro y fuera de éstos, de tal forma que con una nonésima
que logre penetrar comienza la corrosión. “Lo que hicimos –agregó Castaño- fue
igualar la cantidad de oxígeno dentro y fuera del metal, lo cual impide su oxidación”.
Por el momento, el recubrimiento se aplica al acero y a la plata, pero
esperamos en poco tiempo utilizarlo en todos los metales.
En la actualidad, el FATA tiene en proceso de
comercialización el producto, con el propósito de obtener mayores recursos
económicos para la Universidad y con estos fortalecer las investigaciones.
El titular del FATA dijo que en el caso del recubrimiento
cerámico, tiene un espesor de nanómetro –equivale a 10 a la menos nueve metros
o mil millonésimas partes de un metro--. El producto se deposita en algunos
tipos de plástico, lo que le permite una mayor conservación porque evita que se
raye. Puso como ejemplo las micas de los lentes.
En cuanto al recubrimiento del vidrio, el investigador
comentó que por lo regular este material tiene poca resistencia al impacto. Al
aplicarle el nuevo material mejora sus propiedades y disminuye la posibilidad
de ruptura, especialmente a los cristales usados en los automóviles.
Castaño comentó que en otros países se utilizan técnicas
distintas en el tratamiento del vidrio, pero la creada por la UNAM, tras una
investigación de seis meses, está basada en tecnología exclusivamente mexicana.
Además, de estas innovaciones, el jefe de la División del
FATA dio a conocer la mezcla de asfalto con hule, dos materiales repelentes
entre sí, que fueron fusionados y propician mayor duración de la cinta
asfáltica. Este producto también puede ser utilizado como impermeabilizante
para techos, incluso en breve será comercializado.
Otra aportación de los investigadores universitarios del
FATA es el recubrimiento dental, que impide que los dientes se manchen por
fumar, beber café o refresco, el cual todavía se encuentra en la etapa de
prueba y está en trámite la validación por parte de la Secretaría de Salud
(SSA).
Todos los desarrollos tecnológicos, resaltó el
especialista, tienen una inversión costosa que no se puede cuantificar
económicamente, pero requiere de una importante participación de investigadores
y estudiantes, así como de la utilización de toda la infraestructura de la
UNAM.
Los desarrollos tecnológicos, informó, tienen como destino
su comercialización –como ya se ha hecho en algunos casos -, por lo que se
espera quela Universidad Nacional logre obtener recursos económicos de ellos.
El FATA, fundado en 1991 en el Instituto de Física de la
UNAM, se trasladó al Campus Juriquilla como parte del proceso de descentralización
promovido por la Rectoría. Ahí laboran 15 investigadores y 13 técnicos
académicos de tiempo completo.
En esta dependencia se realiza investigación científica
aplicada con un enfoque multidisciplinario. También, contribuye a la formación
de recursos humanos en física aplicada, mediante el apoyo de programas
académicos de la región en los niveles licenciatura y postgrado.
Además, establece mecanismos que permiten la colaboración
fructífera con la industria, con lo que impulsa la vinculación entre el sector
productivo y el académico, además lleva a cabo actividades de divulgación con
el propósito de participar en forma activa en los desarrollos científico y
cultural de la región.
En materia de productividad académica, el FATA ha publicado
cerca de 300 artículos en revistas internacionales y 50 en nacionales; se han
dirigido 18 tesis de doctorado, 21 de maestría y 168 de licenciatura, así como
se obtuvieron patentes del país y extranjeras.
De los trabajos de investigación pendientes, Víctor Manuel
Castaño mencionó el de fibra óptica de plástico para la telefonía y la
comunicación; materiales que servirán de dosímetros, lo que significa la
medición de la radiación y, el diseño y desarrollo de espejos novedosos para el
enfoque de ondas de choque en litotripsia, entre otros proyectos.
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